Wall Street se toma este jueves un alto en su imparable ascenso. Los inversores optan por hacer caja con el enésimo rally de los grandes índices neoyorquinos a pesar de que los datos de paro acompañaban como hacía semanas que no lo hacían. El tecnológico Nasdaq es el que más cede tras haber sumado un nuevo máximo tras otro esta semana.

El foco de la sesión está en el incremento del déficit comercial de EEUU en julio, una marca que la administración Trump vigila con atención para determinar eventuales revisiones de aranceles. Ahora, con la campaña presidencial tomando velocidad de crucero, el incremento del 18,9% registrado se convierte en un dolor de cabeza para los inversores, que temen un recrudecimiento de las tensiones con China.

Este panorama penaliza especialmente a las tecnológicas, por tratarse de uno de los sectores más expuestos a cualquier disputa comercial entre ambas potencias. Así, el Nasdaq se ha dejado un 5% hasta los 11.458 puntos después de días acumulando récords. El S&P 500 cede un 3,5% hasta los 3.455 enteros. El  Dow Jones también ha sucumbido a los bajistas y se ha dejado un 2,7% hasta los 29.140 puntos.

Comercio exterior

La referencia del comercio exterior marca una brecha de 63.600 millones de dólares entre importaciones y exportaciones. Hace un mes, este déficit ya alcanzaba los 53.500 millones de dólares, una cota suficiente como para batir las previsiones más pesimistas del mercado. Lo mismo que ha ocurrido este jueves.

El dato amable desde el terreno macroeconómico ha llegado con el recuento semanal de peticiones de ayuda al desempleo. Después de dos semanas, el dato vuelve a estar por debajo del millón. Concretamente, se queda en 881.000 peticiones, una cifra que incluso mejora los pronósticos más difundidos.

Economía en expansión

Con este registro, cae el dato acumulado. Además, el informe Challenger de recortes de empleo en corporaciones marca un incremento del 116,5% en agosto, lo que a pesar de ser una abultadísima interanual se queda en anecdótica al compararse con el 576,1% de julio. 

Por lo que se refiere a los índices PMI de actvidad sectorial, el de manufacturas se queda en 50,1 puntos, mientras que el de servicios remonta hasta los 55 enteros. En ambos casos, se cumplen o rebasan las previsiones de los analistas y, además, se avanza en terreno expansivo, por encima de la cota de los 50 puntos.

Tesla alarga su frenada

En lo corporativo, el frenazo de Tesla se repite una jornada más. Tras unos primeros compases de euforia cuando el lunes estrenó su desdoblamiento de acciones, las caídas no han hecho más que sucederse. Este jueves se deja un 9% y pierde la ventaja en capitalización que había conseguido sobre Visa.

Apple, por su parte, se ha dejado un 8% al cierre y ha registrado su peor día desde el 16 de marzo cuando perdía un 13%. 

Más profunda aún, hasta del 13,6%, es la caída de The Michaels Companies. Las débiles perspectivas presentadas por la firma de arte y artesanías pesan sobre su cotización a pesar de que las cuentas de su segundo trimestre fiscal han resultado más amables que lo que se venía vaticinando en el mercado a consecuencia del cierre de sus tiendas físicas durante la fase más estricta del confinamiento.

Por su parte, las acciones de Facebook se dejan más de un 3,7% después de haber anunciado un nuevo veto a la publicidad electoral en sus redes sociales. El grupo fundado por Mark Zuckerberg prohibirá anuncios relacionados con las presidenciales en EEUU desde la semana previa al 3 de noviembre, la fecha designada para el paso por las urnas.

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