Lleva apenas cinco meses en el cargo. No es mucho, pero sí el suficiente para que José Antonio Marco Sanjuán,presidente del Tribunal Económico-Administrativo Central, ya haga el mismo diagnóstico que sus predecesores. La carga de trabajo no para de aumentar y no se dictan resoluciones. El atasco es monumental.

Su antecesor, Emilio Pujalte, declaró públicamente en unas jornadas que llevaba "seis años pidiendo más funcionarios para solucionar el problema¿. Ahora es Sanjuán quien hace la petición. ¿Incorporar a profesionales de las nuevas promociones al Tribunal Central, y mejorar la calidad del trabajo que se hace para que resulte atractivo", son algunas de las soluciones que el presidente del TEAC plantea para ¿desatascar los numerosos expedientes que están pendientes de resolución.

Así se expresó José Antonio Marco Sanjuán en el IV Encuentro de Expertos Contables y Tributarios de España, organizado por la AECE.  Ante ese auditorio se comprometió a disminuir los retrasos y hacer que el TEAC sea eficiente. ¿No es de recibo que un contribuyente tenga que esperar siete años para que se resuelva su expediente¿. También aprovechó su intervención para pedir seguridad jurídica y mejorar la imagen de los tribunales.

Los contribuyentes no pueden acudir a la vía judicial a priori. Deben presentar una reclamación a los tribunales económico-administrativos regionales y, en su caso, al central.

¿Por qué se encuentran al borde del colapso los tribunales económico-administrativos? José Ramón Fernández de la Cigoña, director administrativo y financiero de CEF, asegura que estos tribunales acumulan más de 300.000 reclamaciones pendientes de resolver por falta de recursos y personal. Esto supone una amenaza de pérdida de cientos de millones de euros de las arcas del Estado, ya que si prescriben los expedientes, a los intereses de demora hay que añadir el coste de los avales.

El motivo de este atasco, a su juicio, son las intensas campañas contra el fraude fiscal de los últimos años, que son recurridas por los contribuyentes, a lo que hay que añadir que, con la crisis, se han incrementado las reclamaciones, hasta el punto de que desde el año 2009 el número de quejas presentadas en estos tribunales supera a las que se resuelven.

En su opinión, son necesarios profesionales con alto grado de especialización en el ámbito de la Tributación.