Paula Mercado, directora de análisis de VDOS Stochastics y quefondos.com

Quien pudiera creer que los mercados financieros iban a continuar su tendencia alcista de los últimos años, ha de ser de la clase de personas que siempre ve el vaso medio lleno. Hay quien piensa que el mercado alcista puede dividirse en dos fases. La primera se caracteriza por la tendencia asumir un riesgo superior al de su perfil; lo que observamos que sucedió algunos años atrás, tratando de rentabilizar la inversión en un entorno de ultra bajos tipos de interés en que los activos se recuperaban de su severa corrección tras la etapa más dura de la crisis financiera.

En la segunda fase, comienza a notarse una divergencia de diferentes sectores. En el caso de EEUU, energía y biotecnología tomaron la delantera en 2013 y 2014, sólo pare retroceder en 2015 cuando las tecnológicas se convirtieron en las favoritas de los inversores.

Y son precisamente las tecnológicas las que han encabezados los últimos retrocesos en su cotización recientemente, arrastrando a los principales índices (de los que forman parte) y contagiando al resto de mercados. El entorno, por supuesto, no ayuda: guerra comercial entre EEUU y China, subida del precio de petróleo e inestabilidad geopolítica en Europa, entre otros factores.

Puede ser desde luego un buen momento para comprar barato, si no se temen las posibles pérdidas que el mercado de acciones puede seguir sumando. Se puede invertir en fondos de renta fija, aunque con vistas a obtener retornos modestos. Otra opción es la inclusión en la cartera de fondos de gestión alternativa que, pudiendo invertir en cualquier tipo de activo, utilizan para su gestión estrategias de gestión alternativa tales como long/short, market neutral,global macro o event driven. Los gestores de este tipo de fondos hacen uso de estas estrategias de inversión con el objeto de obtener retornos absolutos positivos en cualquier entorno de mercado.

Siguiendo este tipo de estrategias, se han seleccionado los fondos de la categoría de Gestión Alternativa, con calificación cinco estrellas de VDOS, con un nivel de volatilidad en el último año de entre el 2% y 5%. El más rentable de este grupo es la clase P en euros de PICTET TOTAL RETURN - AGORA con un 6,60% desde el comienzo del año. A un año se revaloriza un 6,19%, registrando un controlado dato de volatilidad de 3,06%, que lo sitúa entre los mejores de su categoría por este concepto, en el quintil cinco.

Se gestiona utilizando estrategias long/short (posicionas cortas y largas) que dan generalmente una posición de mercado neutra. Su objetivo es obtener rentabilidad, con el foco puesto en la preservación del capital. Combina posiciones largas tradicionales con posiciones sintéticas cortas y largas, a través del uso de derivados. Con un patrimonio bajo gestión de 172 millones de euros, la inversión en este fondo no requiere una aportación mínima inicial, aplicando a sus partícipes una comisión fija de 2,30% y de 0,22% de depósito, además de una comisión variable de 20%sobre resultados positivos entre el fondo y su índice de referencia EONIA.

También en el quintil cinco por volatilidad a un año, con un 2,87%, la clase H en euros de MAN GLG ALPHA SELECT ALTERNATIVE DL gana un 5,08% por rentabilidad en el mismo periodo. Desde enero, se anota una revalorización de 3,63%. Su objetivo es proporcionar retornos positivos a través de una inversión que se centra, principalmente, en acciones de emisores de Reino Unido u otros emisores que deriven una parte sustancial de sus ingresos de la economía británica. Gestiona un patrimonio de 22 millones de euros, siendo necesaria una inversión mínima de 1.000 euros para suscribir este fondo que grava a sus partícipes con una comisión fija de 1,50% y de 0,04%, además de una comisión variable de 20% sobre resultados positivos entre el fondo y su índice de referencia, el índice LIBOR de Tipos Interbancarios de Londres.

Un 0,53% es la rentabilidad obtenida en el año por la clase E2 con cobertura en euros de BLACKROCK GLOBAL EVENT DRIVEN. A un año no consiguemantenerse en terreno positivo por rentabilidad, aunque registra un controlado dato de volatilidad de 4,78%, que lo sitúa en el segundo grupo de fondos de su categoría con mejor dato de volatilidad, en el quintil cuatro. Tomando como referencia el índice BofA ML 3M USD Treasury Bill, el fondo busca alcanzar un retorno absoluto positivo para los inversores, con independencia de los cambios en los mercados. Al objeto de lograrlo, toma posiciones largas, así como posiciones sintéticas tanto largas como cortas a través de un espectro de inversión global. Cuenta con un patrimonio bajo gestión de 10 millones de euros, aplicando una comisión fija de 1,50% y de depósito del 0,40%, además de una comisión variable de 20%  sobre resultados positivos entre el fondo y su índice de referencia. Es necesaria una inversión mínima de 5.000 dólares (aproximadamente 4.338 euros) para suscribir la clase E2 con cobertura en euros de este fondo.

Las inversiones alternativas pueden ser utilizadas como una fuente consistente de descorrelación, proporcionando retornos al mismo tiempo que buscan limitar el impacto de mercados bajistas. Utilizan técnicas de inversión específicas, estrategias de inversión dinámicas, análisis fundamental en profundidad y una mayor diversificación, con una asignación de activos dinámica. Pueden asimismo mejorar el perfil de riesgo-rentabilidad de una cartera de inversión.

Desde el inversor conservador hasta el de perfil más dinámico, suponen una fuente adicional de retornos descorrelacionados. La clave de su éxito reside en la elección del gestor adecuado y la estrategia adecuada, de acuerdo con el perfil de inversión.