p>Wall Street ha cerrado sesión este viernes con pleno bajista en sus tres principales índices. El Dow Jones ha caído un 0,31% hasta los 25.916,54 puntos. El S&P 500 se ha dejado un 0,22% en los 2.871,68 puntos. Mientras que el tecnológico Nasdaq ha retrocedido un 0,26% hasta los 7.902,54 puntos.

 

El punto álgido de la sesión ha llegado antes incluso de la apertura a negociación de la Bolsa neoyorquina, con el dato del paro de agosto en EEUU. La primera economía mundial creó 201.000 nuevos puestos de trabajo en el mes, máximos de los últimos nueve años y así la tasa de desempleo se ha mantenido en el 3,9%, según las cifras publicadas por el Departamento de Trabajo.

Sin embargo, los miedos a la guerra comercial y la debilidad de los emergentes pesan más en el ánimo inversor. Y es que, Trump ha amenazado con imponer otros 267.000 millones de dólares en aranceles a China, que se sumarían a los 200.000 millones que su Gobierno está preparando. Apple, que ha caído un 0,81% ha avisado de que este paquete contra el Gigante Asiático afectaría a varios de sus dispostiivos estrella como el Apple Pencil, los AirPods, y los Mac Mini.

Las tecnológicas vuelven a situarse en el blanco de las órdenes de venta. Tesla se ha desplomado un 6,3% adicional, en zona de mínimos del último semestre, después de concerse que su director financiero, Dave Morton, renunció a su puesto el pasado 4 de septiembre.

Su despedida se ha conocido ahora, pero se produjo apenas un mes después de su nombramiento y en plena resaca después de los anuncios del presidente Elon Musk sobre una posible, y luego descartada, exclusión de bolsa de la compañía. Un extraño movimiento que ya le cuesta al empresario las primeras demandas en su contra.

Más amables son los inversores con Palo Alto Networks. Sus acciones han subido un 3,29% una vez que comienzan a llegar las mejoras de recomendación consecuencia de un cierre de ejercicio fiscal que supera con creces las previsiones de los analistas. Los últimos en piropear a la cotizada han sido los de Susquehanna y los de Piper Jaffray, que han subido su precio objetivo desde 230 hasta 250 dólares por acción.

Turbulencias en GameStop, que tan pronto caía como subía para cerrar con un ligerísimo retroceso del un 0,062% después de que varios analistas hayan puesto en duda su inminente compra por parte de un fondo de capital riesgo. Desde la casa de inversión Wedbush consideran que la operación no tendrá lugar a corto plazo porque la cotizada ronda los 2.200 millones de dólares de capitalización, cifra que supone siete veces sus flujos netos de caja. Una ratio que en el informe consideran de difícil justificación.