Así se desprende del último informe realizado por la Asociación Hipotecaria Española (AHE), en el que también se apunta a que el importe medio ponderado del total de la cartera se situó en los 90.415 euros, donde el colateral residencial, que representa aproximadamente el 78% del total, registra un valor medio de 74.445 euros, mientras que el comercial asciende a 212.343 euros.

Dentro del segmento residencial, un 84,1% del saldo vivo está destinado a la financiación de una vivienda principal, un 9,6% se corresponde con el crédito a la segunda residencia de uso vacacional, un 0,7% de la cartera a financiar viviendas adquiridas con la finalidad de llevar a cabo una inversión inmobiliaria, mientras que el 5,6% restante está constituido por inmuebles residenciales de distinta naturaleza.

Una amplia mayoría de la exposición residencial (97%) se concentra en la financiación de la primera hipoteca, siendo algo menos del 3% la proporción que corresponde con segundas o ulteriores hipotecas.

De su lado, en la cartera comercial, el sector industrial representa un 19,7%, prácticamente igual que en el informe anterior, si bien muestra un repunte respecto a años atrás. Según AHE, probablemente esto sea fruto del fenómeno logístico del e-commerce.

La financiación destinada a suelo y a promotores o colaterales en desarrollo asciende al 7,3% y el 14,5% del volumen total de este segmento, respectivamente, lo que representa una caída de 2,5 puntos porcentuales. La banca, siguiendo las recomendaciones de las autoridades europeas, continúa reduciendo de forma "significativa" los niveles de exposición al ladrillo.

El sector minorista o de retail representa también una parte importante de la cartera, al constituir el 10,5% del portfolio, seguido del sector de la hostelería y el turismo (7,2%), oficinas (4,9%), centros comerciales (3,8%), agricultura (1,4%) y otras finalidades (30,6%).

PLAZO MEDIO DE AMORTIZACIÓN: 3,11 AÑOS MENOS

La evolución del plazo medio de amortización ha experimentado un notable descenso, desde los 17,81 años a junio de 2017, hasta los 14,70 años registrados en el primer trimestre de 2018. Esta importante variación anómala en el plazo podría estar justificada por la venta de grandes carteras, donde especialmente se verían afectados los préstamos de mayor plazo de amortización respecto a los actuales.

Así, un 15,5% del volumen de la cartera viva está previsto que se amortice en los próximos cinco años, un 17,7% lo hará en el plazo comprendido entre los próximos cinco y diez años, quedando un porcentaje de la cartera, un 66,8%, cuyo plazo de vencimiento es superior a diez años.

AUMENTAN LAS HIPOTECAS A TIPO FIJO

Por otro lado, mientras que la cartera comercial mantiene una estructura de tipo de interés fijo en el 12,7% de los préstamos y con un tipo de interés variable el 87,3% restante, en la cartera residencial se observa que el volumen de préstamos a tipo fijo ha crecido desde el 7% al 8,5%.

Según señala la asociación, esto no responde necesariamente a que se hayan amortizado o cancelado más préstamos a tipo variable que aumenten la cuota de los fijos, sino que es fruto de la favorable aceptación que está teniendo esta modalidad de préstamo en la nueva generación.

DESINVERSIÓN DE CARTERAS PROBLEMÁTICAS

La ratio ponderada de préstamos dudosos (NPL, por sus siglas en inglés) ha continuado con la tendencia descendiente mostrada años anteriores, disminuyendo desde el 8,2% observado en el último informe, hasta el 6,4% registrado este mes de marzo.

No obstante, aunque la evolución favorable que viene manteniendo la economía, en gran medida, está favoreciendo que el sistema goce de mejor salud financiera, parte de la caída tiene una correlación directa con la desinversión de las entidades de crédito de grandes carteras de activos problemáticos.

En este sentido, mientras que en el segmento residencial la tasa de NPLs se sitúa en el 4,2%, frente al 5,2% anterior, en el caso del colateral comercial, la cartera se apunta un descenso algo más pronunciado, desde suponer el 18%, hasta el 13,8%.