En marzo, las adquisiciones de valores de deuda española a largo plazo por parte de inversores japoneses sumaron un total de 1,17 billones de yenes (8.993 millones de euros), mientras dispusieron de 890.000 millones de yenes (6.829 millones de euros).

A nivel global, los inversores nipones aumentaron en 901.800 millones de yenes (6.926 millones de euros) su exposición neta a valores con vencimiento a largo plazo denominados en euros, un 5,3% menos que los 952.200 millones de yenes (7.314 millones de euros) del mes anterior.

De este modo, los inversores nipones aumentaron su exposición neta a la deuda española a largo plazo por noveno mes consecutivo, multiplicando por cinco la apuesta neta de 51.900 millones de yenes (399 millones de euros) realizada en febrero y por casi siete los 41.300 millones de yenes (317 millones de euros) de marzo de 2017.

El sensible incremento de la exposición de los inversores japoneses a la deuda española coincidió con la mejora de la calificación soberana de España por parte de las agencias Fitch y S&P Global, desde 'BBB+' a 'A-', que fueron secundadas posteriormente en abril por DBRS y Moody's.

A diferencia de la deuda española, los inversores japoneses recortaron significativamente su exposición a la deuda a largo plazo de Francia, con un descenso neto de 28.100 millones de yenes (216 millones de euros), y a la deuda de Italia, con un recorte neto de 66.500 millones de yenes (511 millones de euros).