Con el descenso de marzo, la confianza de los consumidores encadena tres meses consecutivos de retrocesos y se sitúa en su nivel más bajo desde febrero de 2017.

Este indicador lleva dos meses consecutivos por debajo de los 100 puntos. Por encima de esta cifra, la percepción de los consumidores se considera positiva, mientras que por debajo se entiende como negativa.

Los dos indicadores que componen el índice de la confianza del consumidor experimentaron descensos en marzo. En concreto, el indicador sobre situación actual retrocedió medio punto, hasta los 90,1 puntos, como consecuencia del comportamiento negativo de sus tres componentes (situación económica general, valoración del mercado laboral y situación de los hogares).

Por su parte, el índice de expectativas de los consumidores se situó en marzo en 107,2 puntos, lo que supone 1,5 puntos menos que en el mes anterior, con una evolución negativa de sus tres componentes, especialmente la valoración que hacen los consumidores sobre la situación futura de la economía y sobre el mercado de trabajo.