Con retraso y bajo una intensa lluvia ha arrancado esta mañana en Madrid la manifestación por unas pensiones dignas convocada por la Mesa Estatal por el Blindaje de las Pensiones (MERP), a la que han acudido miles de personas.

La cabecera ha iniciado la marcha desde la Puerta del Sol por la Calle Carretas tras la pancarta de la MERP con el lema "Blindemos las pensiones en la Constitución", donde se encontraban los portavoces de la asociación, así como personalidades del mundo de la cultura como los músicos Miguel Ríos, Ana Belén y Víctor Manuel o los escritores Elvira Lindo y Antonio Muñoz Molina.

Tras ellos han marchado otros movimientos ciudadanos entre los que se encuentra el Movimiento Feminista de Madrid o el grupo Recortes Cero.

"Ni el agua ni el viento detiene el movimiento", ha sido una de las consignas coreadas por los manifestantes, que también han gritado "No quedan pensiones para jubilados, pero cómo gastan los despachos del Estado" o "Más pensiones y menos ladrones".

El portavoz de la MERP, Joanen Cunyat, ha asegurado que esta manifestación es "un clamor y una exigencia de la sociedad para que se blinden las pensiones en la Constitución".

Según defiende la mesa, las pensiones deben aparecer en la Constitución como un derecho fundamental y se tiene que prohibir explícitamente su privatización o que pierdan poder adquisitivo.

El secretario general de USO -sindicato que forma parte de la MERP-, Joaquín Pérez da Silva, ha dicho que hay "un claro culpable" de lo que está pasando con las pensiones y que no es solo la reforma de 2013, sino también la de 2011, que llevó a cabo el Gobierno socialista con el acuerdo de los agentes sociales (CEOE, CCOO y UGT).

Ha recordado que tras la reforma de 2013 está la exigua revalorización del 0,25 % de las pensiones en los últimos cinco años, pero ha insistido en que el tema de fondo es saber si las pensiones constituyen una prioridad política y si los partidos están dispuestos a comprometerse con su futuro sin tratar de sacar rédito político a este tema.

La marcha ha concluido en la plaza del Museo Reina Sofía donde se ha leído el manifiesto de la MERP, firmado por más de 200 organizaciones y 100 personalidades del mundo de la cultura, en el que se pone de manifiesto "el deterioro y la pérdida de poder adquisitivo" que está afectando a las pensiones públicas.

Asimismo, asegura que "nuevas medidas, como el factor de sostenibilidad" van a recortar más las pensiones y denuncia que hay "un reiterado intento por ampliar el negocio de los fondos de pensiones privados".

Según el manifiesto, hay que proteger las pensiones "mediante una reforma de la Constitución", ya que "si se blindó el pago de la deuda, aún con más razón hay que blindar las pensiones, porque "nadie puede considerar que los bancos son más importantes que las generaciones que con su esfuerzo y su vida construyen el país".

HACIA UN ESTALLIDO SOCIAL

Los secretarios generales de UGT y CCOO, Pepe Álvarez y Unai Sordo, respectivamente, han advertido hoy de que si el Gobierno sigue sin escuchar lo que sucede en las calles y no toma medidas para fomentar un reparto de la riqueza más justo, se va a producir un estallido social y una creciente movilización.

Álvarez y Sordo se han sumado a la manifestación de Madrid en defensa de las pensiones convocada por la Mesa Estatal por el Blindaje de las Pensiones (MERP), aunque ambos sindicatos también han convocado movilizaciones para hoy en un centenar de ciudades de todo el país.

"Este 'aguacero' de trabajadores y pensionistas en las calles tiene que tener una lectura por parte del Gobierno", ha dicho Sordo bajo la intensa lluvia que en esos momentos caía en la Puerta del Sol.

"España crece, pero esa riqueza no se distribuye entre la mayoría social", ha asegurado Sordo, que ha insistido en que son los pensionistas y los trabajadores los que están todavía pagando las políticas "austericidas" llevadas a cabo durante la crisis.

"No se pueden seguir alargando las medidas de la crisis porque va a haber un estallido social y una creciente movilización", ha añadido el líder sindical, que ha augurado que la gente joven también va a salir a la calle porque quiere garantías para su pensión futura.

Álvarez, por su parte, ha asegurado que "las decenas de miles de personas que están desafiando hoy el tiempo en Madrid" no van a aceptar que la subida de su pensión se quede en el 0,25 %.

"El país crece más del 3 %, las empresas tienen beneficios grandiosos y las pensiones están congeladas", ha incidido Álvarez, que ha afirmado que no hay ninguna razón para no recuperar el poder adquisitivo de las pensiones para que vuelvan a la senda que el Gobierno cambió unilateralmente en 2013 al desligar su subida de la evolución de la inflación.

Según ha dicho, las movilizaciones no acabarán hasta que el Gobierno sea consciente de que tiene que tomar medidas "sin atajos" ni subidas parciales como las anunciadas por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para las pensiones mínimas y las de viudedad.