El documento destaca que el año pasado tanto las previsiones de los organismos públicos como las de las instituciones privadas que participan en la "Diana Esade", elaborada por la escuela de negocios del mismo nombre, se quedaron por debajo de lo que creció finalmente la economía.

El crecimiento del PIB español en 2017 fue del 3,1 %, frente al 2,6 % de promedio que pronosticaron las instituciones, lo que supone una desviación del 0,8 %, el doble que la que se registró en 2016 (0,4 %).

Los que más acertaron con el dato fueron Asexor y Repsol, ambos con una previsión del 2,6 %, seguidos de Bankia, con un 2,5 %, mientras que los que menos se acercaron fueron el Centro de Predicción Económica (Ceprede), con un 1,9 %; la sociedad de valores Intermoney, con un 2 %, y el FMI, con un 2,1 %.

Por su parte, el Gobierno ocupó la octava posición de esta clasificación con un pronóstico de avance de la economía del 2,4 %.

De este modo, en los últimos cinco años, las instituciones han mostrado un pesimismo sistemático al predecir siempre crecimientos por debajo de la realidad.

No obstante, el director de Esade Madrid, Enrique Verdeguer, ha explicado que estas previsiones tan pesimistas se justifican porque "la economía española está muy condicionada a lo que crezcan nuestros principales socios comerciales", un hecho que a priori es difícil de pronosticar.

A España también le influyó directamente el precio del petróleo, que se mantuvo estable en el primer semestre de 2017 y benefició el crecimiento del PIB, así como los tipos de interés, que fueron muy bajos durante el año pasado.

En cuanto al empleo, el informe de Esade señala que las previsiones fueron también más pesimistas que la realidad, con una tasa media de paro del 18,3 % frente al 17,22 % que arroja los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA).

En esta categoría, la patronal CEOE fue la que más acertó, con una tasa de paro del 17,8 %, seguido del Gobierno y la consultora AFI, ambos con un 17,9 %, mientras que Ceprede también fue el que menos se acercó a la realidad con una predicción del 19,6 %.

Estos datos demuestran "la incapacidad de las instituciones de prever la caída de la tasa de desempleo que se está produciendo en España", ha comentado Verdeguer.

El documento también mide la relación o elasticidad entre el crecimiento económico y la creación de empleo y señala que en 2017 esta variante se situó en el 0,85, con una tasa de empleo del 2,6 % y una crecimiento del 3,1 %, lo que demuestra que "la sensibilidad del empleo es cada vez mayor en nuestra economía".

Verdeguer ha apuntado que para las previsiones de este año influirá el conflicto catalán, ya que "la incertidumbre política no beneficia a la hora de prever crecimientos económicos o creación de empleo".

Como novedad, Esade añade una diana dedicada a la zona euro y a las cuatro economías más importantes de Europa: Alemania, Francia, Reino Unido e Italia.

En este sentido, la media de previsiones para la zona euro se situó en el 1,5 %, lejos de lo que en realidad creció, un 2,7 %.

Tampoco se ajustaron los pronósticos para las cuatro grandes economías mencionadas, ya que se adelantó un crecimiento del 1,2 % y registraron un incremento medio del PIB del 2,1 % entre las cuatro.

En el informe "Diana Esade" se recogió la desviación de las previsiones económicas y laborales del pasado año de 21 organismos públicos y privados frente a las cifras con las que cerró la economía. EFECOM

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