Así consta en la última edición de la Encuesta sobre Préstamos Bancarios elaborada por el organismo que gobierna Luis María Linde, de la que se desprende que los criterios de aprobación de los créditos a hogares para adquisición de vivienda volvieron a relajarse "en cierta medida" durante el cuarto trimestre de 2017.

Las condiciones generales aplicadas a los préstamos hipotecarios se suavizaron por los menores costes de financiación y por la mayor disponibilidad de fondos, así como por el aumento de las presiones competitivas, explica el Banco de España, que subraya también que el porcentaje de hipotecas rechazadas volvió a reducirse en este periodo, aunque a un ritmo algo inferior al de los tres meses anteriores.

Asimismo, la demanda de préstamos hipotecarios se incrementó ligeramente entre los meses de octubre y diciembre de 2017 gracias a las mejores perspectivas del mercado de la vivienda y, en menor medida, a la mayor confianza de los consumidores, el descenso en el nivel general de los tipos de interés y el ascenso de las operaciones de reestructuración de deuda.

AUMENTA LA FINANCIACIÓN CON FONDOS PROPIOS

Según explica el otrora supervisor de la banca española, estos efectos se habrían visto "contrarrestados parcialmente" por el aumento de la financiación con fondos propios y, en menor medida, por los cambios regulatorios o fiscales del mercado y por el aumento de los préstamos de otras entidades y de otras fuentes de financiación externa.

"Los resultados de la Encuesta sobre Préstamos Bancarios muestran que, durante el cuarto trimestre de 2017, los criterios de aprobación de préstamos en España se relajaron algo en los segmentos de financiación a los hogares --tanto créditos al consumo como hipotecas--, manteniéndose estables en el de sociedades", reza el documento elaborado por el Banco de España.

Asimismo, la demanda de créditos al consumo también se incrementó en el último trimestre del ejercicio anterior.

En relación a la financiación de entidades, estas percibieron de forma generalizada una "cierta mejoría" en las condiciones de acceso a los mercados minoristas y a casi todos los mayoristas.

Según recoge el Banco de España, las medidas regulatorias y supervisores han "favorecido", en ambas áreas, un "cierto aumento" de los niveles de capital y de los activos ponderados por riesgo.

Para las entidades españolas, "estas actuaciones no habrían tenido un impacto apreciable ni sobre sus condiciones de financiación ni sobre los criterios de concesión de préstamos y los márgenes aplicados".

MAYOR DEMANDA DE CRÉDITO A COMIENZOS DE 2018

De cara al primer trimestre de 2018, las entidades encuestadas no esperan que los criterios de concesión de préstamos se modifiquen ni en el segmento de sociedades ni en los de hogares, mientras que por el lado de la demanda se prevé que las peticiones de fondos aumenten en "todas" las modalidades de préstamos.

En los mercados de financiación minoristas y mayoristas, las proyecciones de las entidades apuntan a una ligera mejora de las condiciones de acceso a los mercados de titulización --fundamentalmente, en el segmento de empresas, en la capacidad para transferir riesgo fuera de balance y en la emisión de valores a medioy largo plazo--.

En relación a las medidas regulatorias y supervisoras, las entidades encuestadas esperan que en el primer semestre de 2018 provoquen un ligero aumento tanto del tamaño total del balance como de los activos líquidos y de los ponderados por riesgo, así como un incremento del nivel de capital, principalmente por el crecimiento de los beneficios no distribuidos.