La bajada --que será especialmente acusada en Jaén, principal provincia productora, con 360.000 toneladas, un 28,5 menos que en la pasada campaña y un 16,5% por debajo de la media-- es consecuencia de la escasez de lluvia y las elevadas temperaturas, especialmente a finales de verano y principios de otoño.

Así lo ha señalado este lunes en Jaén el consejero de Agricultura, Rodrigo Sánchez Haro, que ha sido el encargado de presentar el aforo, sobre el que ha recalcado que "son estimaciones" y la producción real dependerá, sobre todo, de la evolución de la climatología y del posible trasvase de aceituna de mesa a almazara.

Se trata de una campaña "media baja" en la que se pronostica una disminución en todas las provincias andaluzas, salvo en tres donde, con respecto a la campaña anterior se producen crecimientos: Sevilla (+7,7%, con 103.700 toneladas de aceite), Málaga (+23,2%, con 57.700 toneladas) y Almería (+12,2%, con 12.500 toneladas).

A pesar de este escenario, ha expresado su confianza por que el sector afiance un liderazgo, que quedó claro en el último ejercicio con unas exportaciones, entre octubre y agosto, por valor de más de 2.500 millones de euros.

Además, preguntado por el importante descenso en Jaén, en cuya economía el sector oleícola es fundamental, ha lanzado "un mensaje de tranquilidad", ya que "son estimaciones" y, "dependiendo de la climatología en los siguientes meses, puede verse modificado".

"De la mano de las organizaciones agrarias y todo el sector, vamos a trabajar para intentar paliar en la medida de que nos corresponde", ha afirmado el consejero, quien ha aludido a "la alta variabilidad" de cosecha en los diferentes olivares, con una "peor situación" en los de secano.

En materia de riego, ha apoyado la reivindicación de las organizaciones agrarias para ampliar el riego hasta noviembre para el olivar y, cuestionado por un posible escenario de regadío más privilegiado en Sevilla con respecto a Jaén, ha considerado que no lo hay.

Con respecto a la producción nacional, el análisis del Gobierno andaluz prevé una producción de poco más de 1,1 millones de toneladas de aceite de oliva. Sumadas a las 304.400 toneladas del enlace al pasado 30 de septiembre, habría una disponibilidad de en torno a 1,4 millones de toneladas, menor también que en la pasada campaña, aunque el consejero ha dicho esperar que no haya tensiones en los precios.

Sánchez Haro también se ha referido a la actividad que se genera alrededor de la aceituna para almazara. En la temporada 2017-2018, se estiman 13,6 millones de jornales en labores de campo, incluida la recolección (un 6,2 por ciento menos que la pasada), una campaña que será "más corta de lo habitual". Jaén aglutina el 35 por ciento del total con la previsión de 4,8 millones de jornales y, adicionalmente, se espera superar los 143.500 jornales en tareas de molturación.

ACEITUNA DE MESA

En cuanto a la aceituna de mesa, el aforo apunta a una cosecha de alrededor de 422.000 toneladas en toda Andalucía (cae un 19 por ciento con respecto al curso pasado y un 10,6 por ciento si se toma como referencia la media de las últimas cinco campañas).

El descenso más destacado se produce en la principal provincia productora, Sevilla, con 296.170 toneladas que suponen una caída del 24,6 por ciento respecto a la última campaña y un 12,9 por ciento en relación con la media de los cinco ejercicios anteriores.

En este caso, las labores vinculadas al olivar de aceituna de mesa supondrán unos 1,9 millones de jornales de campo, incluida la recolección. La mayor parte, el 81 por ciento con 1,5 millones, se registrarán en Sevilla.

Sánchez Haro ha resaltado que el aforo aporta una información "de gran utilidad para el sector y que ofrece transparencia al mercado", pero que no deja de ser una estimación y, como tal, se ha de tomar con cautela. "Los factores meteorológicos aún pueden afectar a la cosecha final, sin olvidar que aún no es posible saber cuánta aceituna se quedará sin recoger por calidad o rendimiento insuficientes", ha incidido.

CRECIMIENTO EN EL ÁMBITO MUNDIAL

Los números coinciden con una previsión de ascenso de la producción de aceite en el contexto mundial. El Consejo Oleícola Internacional (COI) calcula que se incrementará un doce por ciento para alcanzar las 2.854.000 toneladas, un aumento que descansa, en especial, en la recuperación del cultivo en países como Italia (un 75 por ciento más) y Grecia (un 54 por ciento más) y en la campaña récord que se espera en Portugal (un 58 por ciento más).

Aun así, como ha matizado el titular de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, este volumen (al que España aporta 1.150.000 toneladas, alrededor del 80 por ciento procede de Andalucía) está muy lejos de las 3.552.000 toneladas que se registraron, como techo histórico, en la campaña 2013-2014.

Sobre la aceituna de mesa, el COI fija la cosecha mundial en 2.951.500 toneladas, lo que supone un incremento del tres por ciento y el establecimiento de un nuevo hito, alimentado, entre otros, por los resultados de Egipto (un 30 por ciento más), Turquía (un cuatro por ciento más) o Grecia (un 31 por ciento más).

Sánchez Haro ha apostado, ante una realidad marcada por una menor producción y más competencia que en la campaña anterior, por "unir más aún nuestros esfuerzos para generar mayor valor, diferenciando la calidad de los aceites, y seguir conquistando los mercados internacionales".

Todo ello con "un trabajo orientado al beneficio de todos los eslabones de la cadena de una forma equilibrada". Esto último, según ha anotado, es un objetivo irrenunciable del departamento que dirige, como también lo es el apoyo al sector para afrontar los retos a medio y largo plazo. EL OLIVAR ANDALUZ

Andalucía cuenta con 1,56 millones de hectáreas repartidas entre alrededor de 170.000 explotaciones, según los datos del censo agrario, además de 844 almazaras, 657 envasadoras de aceite, 40 orujeras, 13 refinerías, 219 entamadoras y 115 envasadoras de aceituna.

La mayor superficie de aceituna para almazara se encuentra en Jaén (586.000 hectáreas), donde se localizan hasta 327 almazaras, 233 envasadoras, 14 orujeras, dos refinerías y siete entamadoras. En cuanto a la aceituna de mesa, sobresale Sevilla, con 134 entamadoras que representan en torno al 60% del total de la comunidad autónoma.

En términos globales, se contabilizan hasta 250.000 familias olivareras en más de 300 municipios de la región. El olivar andaluz alcanzó así en 2016 un valor de producción de casi 3.600 millones de euros, un peso que demuestra, ha sentenciado el consejero, por qué "marcamos tendencia y somos referentes en el mercado internacional".