Los datos facilitados por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social -que se centran en los autónomos personas físicas, aquellos que realizan su actividad de manera individual sin pertenecer a ninguna sociedad- revelan que los trabajadores por cuenta propia son cada vez mayores.

De este modo, en 2008, el 66% de los autónomos superaba los 40 años, un porcentaje que ha aumentado en más de 5 puntos, hasta alcanzar el 71,6% en 2017.

En junio de 2017 había en España 3.256.066 autónomos, 162.406 menos que en el mismo mes de 2008, cuando arrancó una crisis económica que en los primeros años provocó la pérdida de 400.000 trabajadores por cuenta propia, de los que ya se han recuperado dos de cada tres, gracias especialmente al empuje de las mujeres emprendedoras.

El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, ha achacado este envejecimiento a la crisis económica, ya que, según ha explicado en declaraciones a EFE, muchos trabajadores mayores de 40 años "fueron expulsados del mercado laboral y no tuvieron más remedio que trabajar por cuenta propia".

Aunque el 23,4% de los trabajadores por cuenta propia se encuadra en el comercio, el 11,7% en la agricultura y el 10,8% en la construcción, los sectores profesionales son los que más han crecido en estos diez años, perdiendo peso los sectores tradicionales y dando entrada a nuevos negocios y nichos de mercado, por ejemplo en actividades inmobiliarias, educación o sanidad.

Por su parte, el secretario general de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), Eduardo Abad, ha asegurado que este cambio es una "evolución natural", ya que en los últimos años se había producido un "boom del emprendimiento" en el que muchos jóvenes sin experiencia entraban al mercado por cuenta propia, debido a la precariedad laboral e impulsados por la tarifa plana de cotización a la Seguridad Social de 50 euros.

"No todo el mundo puede ser autónomo", ha puntualizado Abad.

Según los datos de Empleo, cada vez menos jóvenes menores de 25 años están optando por trabajar por cuenta propia, ya que han pasado de representar el 2,5 % del total a algo menos del 2 %, es decir, en los últimos 9 años, España ha perdido 16.063 jóvenes autónomos.

Este fenómeno, a juicio de Amor, estaría explicado por la actual coyuntura económica española, ya que al mejorar las expectativas laborales, "es obvio que un joven vaya a preferir trabajar por cuenta ajena en lugar de propia".

Sin embargo, la edad no ha sido el único cambio que han adoptado los autónomos en los últimos años, puesto que también ha evolucionado ligeramente los principales sectores económicos a los que dedican su actividad.

Desde el 2008, los principales sectores con tradición autónoma como la industria, la agricultura, el comercio, la construcción y la hostelería han perdido autónomos a favor de las actividades profesionales, que ganan terrero entre los trabajadores por cuenta propia.

El presidente de ATA ha considerado que el auge de las actividades profesionales entre los autónomos se debe a que las empresas han pasado de tener ciertos trabajadores en la plantilla a subcontratar esos servicios, con lo que "la actividad del autónomo está cambiando".

En los últimos nueve años, España ha perdido un total de 224.211 autónomos personas físicas, un dato que ya muestra cierta recuperación desde el peor momento de la crisis, ya que en el primer trimestre de 2013 se marcó el mínimo de este periodo con algo menos de 1,9 millones de autónomos.

Desde ese momento, se han recuperado un total de 101.428 empleos autónomos, hasta llegar a los cerca de dos millones que se registraron en julio de 2017.

LA BURBUJA DEL EMPRENDIMIENTO

Esta mejoría resulta "engañosa" a ojos del secretario general de UPTA, porque a su juicio existe una "burbuja del emprendimiento" que, a través de las bonificaciones de la Seguridad Social, permite entrar al mercado autónomo a personas que no encuentran empleo en el mercado por cuenta ajena.

"La burbuja del emprendimiento es algo que existe, (...) la gente sin trabajo se mete al autoempleo porque como existe la tarifa plana de 50 euros parece que es muy sencillo meterse y probar suerte", ha asegurado Abad.

Respecto al futuro de los autónomos, Amor ha previsto que continúe el auge de las actividades profesionales en detrimento de los sectores tradicionales, mientras que Abad ha defendido la necesidad del emprendimiento de calidad frente a la cantidad.

Respecto a la edad, en la última década ha aumentado casi tres puntos el porcentaje de autónomos de entre 40 y 54 años, hasta representar el 45,8%, y el de quienes tienen 55 o más años, que ha pasado del 23,2% al 25,8%. Por contra, se ha reducido el peso de los más jóvenes. "Los autónomos van cumpliendo años y sus negocios sumando experiencia con ellos", resalta ATA en su informe.

De hecho, la mortalidad de los negocios autónomos se ha reducido en este tiempo y actualmente dos de cada tres tienen más de tres años de antigüedad y uno de cada dos llevan más de cinco años en marcha.