La presidenta de Redeia, Beatriz Corredor, volvió a responsabilizar este jueves a las empresas eléctricas privadas del apagón del pasado 28 de abril, acusándolas de “mala gestión”.
Durante su intervención en la comisión de investigación del Senado sobre el incidente, Corredor insistió así en que el origen de cero nacional se situó en "una planta fotovoltaica de una empresa privada de Badajoz". En concreto, se trataría de la planta de Núñez de Balboa de Iberdrola.
“Y le tengo que decir que esa misma planta había tenido un fallo semejante, acreditado y documentado, el año anterior. Y que los propios responsables de esa planta dijeron que habían estado haciendo un experimento en cuanto a la forma de gestionar esa planta”, defendió Corredor.
Corredor explicó que Red Eléctrica tiene constancia física de que “todo el proceso del apagón se inició a las 12.03" en la citada planta.
Aseguró que se puede demostrar que “la oscilación extraordinaria que empezó a las 12.03, de 0,6 Hz, provino de la mala gestión y de mal control" de la planta fotovoltaica, que "se comportó de forma indebida y que provocó que el sistema se sintiera mucho más vulnerable como consecuencia de esa doble oscilación”.
Asimismo, la presidenta de Redeia señaló que las centrales hidroeléctricas “no estuvieron a la altura” durante el proceso de reposición del sistema, ya que “no fueron capaces de arrancar en autónomo”, según lo acreditado por el Ministerio de Transición Ecológica y la propia Redeia.
Explicó que, pese a que la normativa exige que estas centrales puedan arrancar de forma independiente ante un incidente, fue necesario alimentarlas con electricidad procedente de Francia y Marruecos.
Exculpa de Red Eléctrica
Corredor descartó que el control de la tensión dinámica, responsabilidad de Red Eléctrica y señalado por el Gobierno como factor clave del apagón, fuera insuficiente ese día.
Subrayó que el operador del sistema consideró suficiente tener nueve de las diez centrales encargadas de controlar la tensión acopladas: “el número de grupos no es significativo para determinar la seguridad. Aunque hubieran estado acoplados más grupos, no se hubiera podido evitar el apagón”, afirmó.
En este sentido, Beatriz Corredor ha asegurado que la causa del apagón fue el incumplimiento por parte de los "grupos convencionales" (las empresas privadas) de la obligación vigente de control de tensión en cuanto a la absorción de reactiva.
"Esa fue la causa del apagón y, por tanto, la responsabilidad en ningún caso se puede achacar a la programación de centrales para control dinámico de tensión del día 28 de abril", ha apostillado.
Defiende su cargo
Durante la comisión, Corredor respondió a cuestionamientos sobre su idoneidad para el puesto. Ante la pregunta sobre si se cuestiona su cargo o su formación, destacó que las competencias del presidente no ejecutivo no incluyen actividades de operación, construcción u otros aspectos técnicos del sistema, que son responsabilidad de los operadores.
Asimismo, recordó que el capital de Redeia está compuesto en un 80% por accionistas privados, mientras que el Estado posee el 20%. En este contexto, subrayó que “ese 80% ha ratificado mi gestión en tres ocasiones”.
Finalmente, Corredor defendió su capacidad para desempeñar el cargo, destacando que, aunque es jurista, cumple con todos los requisitos para la presidencia no ejecutiva de la compañía.
“De todos los presidentes a lo largo de la historia de la empresa, sólo uno era ingeniero. No es necesario ser ingeniero para ocupar la presidencia no ejecutiva de una cotizada”, afirmó.
