Las investigaciones que se han realizado hasta la fecha sobre el apagón peninsular del 28 de abril apuntan a tres puntos negros en los que comenzó a desconectarse el sistema eléctrico: las subestaciones eléctricas (o nudos) de Hueneja (Granada), Don Rodrigo (Sevilla) y Valdecaballeros (Badajoz).

A cada una de ellas solo se puede enchufar una infraestructura común de evacuación (ICE) o interlocutor de nudo, que es como una regleta donde se conectan todos y cada uno de los parques renovables y centrales eléctricas de la zona.

Funcionan como una multipropiedad, es decir, todos los propietarios de los parques enchufados participan en una sociedad vehículo que se crea para gestionarlo. El problema es que, a medida que se han ido construyendo nuevos parques renovables en las últimas décadas, se han ido sumando nuevas tomas a 'esa regleta'.

Algunas han crecido tanto que hay ICEs con casi 1.000 MW de multipropiedad y "multitecnología". De hecho, esas tres apuntadas como iniciadoras del apagón son de las 15 más grandes que hay en el país.

"Red Eléctrica (REE) ha creado una pléyade de infraestructuras de evacuación para conectar parques renovables al transporte con muchos copropietarios, pero cuyos datos controla a través de sus subestaciones eléctricas", explican fuentes del sector eléctrico a EL ESPAÑOL-Invertia.

"Hay nudos renovables descomunales que cuelgan de un solo interruptor, que tiene sus protecciones electrotécnicas para la mejor conservación de las máquinas eléctricas. Pero si se dispara ese interruptor se cae toda la potencia".

"En esas ICE están todos los promotores: desde las grandes, como Endesa, Iberdrola, Acciona, Naturgy, hasta los médicos de Salamanca, los notarios de Murcia, fondos internacionales, empresas públicas autonómicas, el IDAE, etc. Es una arquitectura regulatoria y topológica diseñada por los gobiernos y el operador del sistema (REE) desde hace 30 años", aseguran.

Quién está detrás

Pero ¿quién está detrás de las 'regletas' conectadas a las subestaciones investigadas?

"La CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) ha dirigido un oficio de investigación hacia todos los propietarios que tienen parques conectados en los nudos de Hueneja (Granada), Don Rodrigo (Sevilla) y Valdecaballeros (Badajoz)", continúan las mismas fuentes.

"Hay una amalgama de empresas termosolares, fotovoltaicas y eólicas. Por ejemplo, en Hueneja están conectadas las centrales termosolares del fondo de inversión Cubico, los parques eólicos del fondo emiratí Masdar o las plantas fotovoltaicas de Diverxia Infrastructure, pero hay muchas más empresas, con plantas más pequeñas también conectadas", explican las fuentes consultadas.

Esas mismas personas siguen explicando que "en Don Rodrigo, por ejemplo, está Bruc, la empresa de renovables de Juan Béjar, con 700 MW de fotovoltaica, también Statkfraft dispone de otra tanta capacidad solar, y muchos más".

"Y en Valdecaballeros, está la termosolar de Abengoa o los parques fotovoltaicos que HYVE vendió hace poco a Repsol, y también Enel. Sin embargo, la lista es muy larga, porque este nudo es el más grande de los tres investigados, con 947 MW conectados, una barbaridad", sentencian.

Al parecer, la carta enviada por la CNMC ha llegado a todos los participantes en esos nudos. Sin embargo, las fuentes consultadas por este diario insisten en que "toda esa información está replicada en la subestación de Red Eléctrica (Redeia), por tanto, el operador del sistema ya dispone de todos los datos".

Ello apunta a que la investigación no se centra en los grandes operadores privados, como ha señalado REE, sino en un popurrí de empresas y asociaciones de todo tipo.

"Cada ICE o sociedad vehicular tiene su presidente (que suele ser la primera empresa que se instaló allí, el interlocutor de nudo), su consejo de administración y sus cuentas, y es en esas sociedades donde REE tiene que fijarse si no le llega la información a tiempo", explican.

Falta de inercia

Fuentes del sector aseguran que al apuntar a las tres subestaciones como los tres focos del apagón, que se produjo en milisegundos, no deja lugar a la duda de que el problema estuvo en varios puntos a la vez.

Por tanto, se entendería que no fue un fenómeno local, sino una pérdida de estabilidad general del sistema de transporte de REE por falta de inercia síncrona que no fue capaz de controlar la tensión.

Algo que también han sugerido los informes de la Comisión de Investigación del MITECO, los avances presentados por ENTSO-e (Asociación de Gestores Europeos de Redes de Transporte de Electricidad) o por la asociación de las grandes eléctricas (AELEC).

Aún así, las investigaciones continúan y la CNMC será la primera en apuntar los posibles responsables del peor incidente del sector eléctrico en décadas.