Los hogares y pymes acogidos al PVPC (Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor), la tarifa regulada de la luz, tendrán un nuevo sistema de cálculo de los precios de su factura. El Gobierno ha dado luz verde a la aprobación de una nueva tarifa regulada la luz con la que busca proteger a los consumidores eléctricos de futuros episodios de volatilidad en los precios. Con todo, esto no asegura que sea la tarifa más barata del mercado, su objetivo original.

En concreto, el Consejo de Ministros, a propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, ha aprobado un real decreto por el que se modifica la metodología de cálculo de la tarifa regulada de la luz, que se publicará previsiblemente este miércoles en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Se busca aportar más estabilidad a las facturas finales de los consumidores dando un mayor peso progresivo a los mercados de futuros.

Esta nueva fórmula entrará en vigor a partir del próximo 1 de enero de 2024. Desde esta fecha, los consumidores comenzarán a notarla en sus facturas -no tendrán que hacer nada para acogerse a estos cambios-.

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Se incorporará así parcialmente las señales de precio a largo plazo, abordando una dexindexación parcial de los mercados al contado, al incluir referencias de los mercados de futuro que darán, en opinión del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, más estabilidad a los recibos finales que tendrán que abonar los usuarios.

No obstante, la entrada en vigor del nuevo diseño para las comercializadoras de referencia (COR), aquellas designadas por el Gobierno y que están obligadas a suministrar la tarifa regulada, ocurrirá antes, el 1 de julio, con el fin de abordar las cotizaciones de la cesta de futuros.

De esta manera, el Ejecutivo entierra el PVPC -al que están vinculados unos nueve millones de hogares, entre ellos los 1,5 millones que reciben el bono social- como se ha conocido hasta la actualidad, que fue creado en 2014 por el Gobierno del PP. Hasta ahora se había indexado a los precios diarios del Mercado Ibérico de la Electricidad (Mibel), y era la opción más barata para los pequeños consumidores desde su creación, cuando se abordó como una reforma de la tarifa eléctrica por los problemas de las subastas Cesur.

Fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico consideran que lo que ha ocurrido con la crisis motivada por la guerra de Ucrania es un episodio que se podría repetir en el futuro. 

Volatilidad

El peso marginal de los combustibles fósiles va a ser decreciente pero se van a producir fenómenos geopolíticos que provocarán estas crisis de precios. Por ello se impulsa esta medida, que fue también uno de los compromisos de España con la Comisión Europea cuando se recibió el visto bueno a la aplicación de la denominada excepción ibérica.

No obstante, las mismas fuentes, que no precisaron estimaciones de un posible impacto sobre el recibo de la luz de la nueva metodología, subrayaron que el objetivo de la reforma es actuar sobre esa volatilidad. Con todo, no está tan claro que lo vaya a hacer sobre los niveles de precios, al introducir ese mayor peso a los precios a largo plazo.

Futuros

Con esta reforma del PVPC se lleva a cabo una indexación parcial de los mercados al contado, al incorporar referencias de los mercados futuros que aportarán esa mayor estabilidad a las facturas finales de los consumidores.

El peso de los mercados de futuros aumentará progresivamente, representando el 25% en 2024, el 40% en 2025 y alcanzando ya el 55% a partir de 2026, mientras que la indexación al contado irá perdiendo así su peso pasando del 75% el año que viene al 45% al final.

Mientras, la referencia de precio de los mercados a futuros estará integrada por una cesta de productos a plazo con distinto horizonte temporal: el 10% correspondería al producto mensual, el 36% al producto trimestral y el 54% al producto anual.

No obstante, la nueva metodología mantendrá la señal de precios horarios al preservar el diferencial resultante de la casación del mercado diario, lo que contribuirá a fomentar patrones de consumo eficientes para aprovechar las horas más baratas, añadieron en el Ministerio.

Asimismo, se ha introducido un componente de prima de riesgo por volumen con el fin de garantizar el equilibrio económico para las comercializadoras de referencia.

Por otra parte, en cumplimiento de la Directiva 2019/944 de mercado interior de electricidad, a partir del 1 de enero de 2024 solamente podrán acogerse a la tarifa regulada hogares y micropymes -que tendrán que certificar su condición a través de una declaración responsable- con una potencia contratada menor o igual a 10 kilovatios (kW).

De esta manera, se expulsará del PVPC a todos esos consumidores que no se incluyan en estos dos grupos, aunque será también de manera gradual y se les podrá seguir, inicialmente, suministrando el PVPC pero con un recargo del 20%.