Un consorcio liderado por Equinor y ExxonMobil realizarán una inversión de 8.000 millones de dólares (6.568 millones de euros) para desarrollar la fase uno del campo de Bacalhau, situado en el área de presal brasileña de Santos, según ha informado la compañía noruega en un comunicado.

El consorcio está formado por Equinor, ExxonMobil y la brasileña Petrogal. Las dos primeras empresas contarán con una participación del 40%, mientras que el 20% restante será para Petrogal. El desarrollo del proyecto fue aprobado por la Agencia Brasileña Nacional de Petróleo, Gas Natural y Biocombustibles en marzo de 2021.

El desarrollo consistirá en la producción de 19 pozos submarinos conectados a una plataforma flotante de producción, almacenamiento y descarga (FPSO, por sus siglas en inglés). Será una de las más grandes en Brasil con una capacidad de producción de 220.000 barriles diarios y una capacidad de almacenamiento de dos millones de barriles.

El campo Bacalhau se ubica en dos bloques situados en el norte de la región de Carcará. El contratista de la plataforma flotante será el operador de la misma durante el primer año. A partir de entonces, Equinor planea operar las instalaciones hasta finalizar el proyecto.

Asimismo, las firmas prevén que la intensidad media de dióxido de carbono (CO2) sea inferior a los 9 kilogramos por barril producido, un nivel más bajo que el promedio mundial de 17 kilos por barril.

"Bacalhau es el primer campo verde desarrollado por un operador internacional en el área de presal y crearemos un gran valor añadido para Brasil, Equinor y sus socios", ha destacado el vicepresidente de Proyectos de Equinor, Arne Sigve Nylund. También ha señalado que la buena cooperación entre las compañías, las autoridades brasileñas y los proveedores ha resultado en la decisión de invertir en este terreno.

Según ha explicado Nylund, el campo de Bacalhau es un proyecto competitivo a nivel global incluso con un precio del barril de petróleo por debajo de los 35 dólares.

Por su parte, el responsable de ExxonMobil en Brasil, Juan Lessmann, ha resaltado esta iniciativa como una inversión estratégica para el portafolio de la compañía por su potencial de generar grandes beneficios. "Este proyecto ha progresado por la sólida colaboración entre ExxonMobil, Equinor, Petrogal y el Gobierno", ha apostillado.

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