BBVA ha cerrado la ronda de resultados empresariales de la gran banca española. Y lo hace con un claro giro en su discurso sobre el riesgo reputacional que desde hace meses afronta la entidad por su implicación en el ‘caso Villarejo’. 

Frente a las advertencias que en su último Informe de Gobierno Corporativo realizaba la entidad, así como en diversas apariciones públicas de sus directivos, el consejero delegado del banco, BBVA, asegura ahora que no ha visto ningún tipo de impacto, “ni reputacional ni económico ni en la evolución del precio de la acción” por la trama en la que la entidad está llamada a declarar como persona jurídica investigada en la trama de las escuchas. 

“La reputación es algo muy difícil de medir, es un asunto intangible”, ha explicado Genç durante la presentación de resultados del banco. “Me reúno casi a diario con inversores y nunca me han mostrado preocupacion por este asunto”, ha insistido el directivo, que ha rechazado dar nuevos detalles sobre la investigación o definir la fecha en la que tendrá que acudir a declarar ante la Audiencia Nacional. 

Su mensaje difiere, y mucho, del que el mismo directivo lanzó en la presentación de cuentas del segundo semestre, explicando que el 'caso Villarejo' estaba impactando ya en la reputación de BBVA. "No nos gusta aparecer en los medios a diario", aseguraba el banquero por entonces.

DEPÓSITOS

Onur Genç sí ha querido, sin embargo, entrar en la polémica por la posibilidad de cobrar por los tipos de interés de sus clientes para compensar el imapcto de los tipos negativos en los márgenes de la entidad. Y el banquero no descarta que acabe trasladando a los particulares ese coste del -0,50% que actualmente paga al BCE por depositar su liquidez. “De momento no están en nuestros planes cobrar a los minoristas, pero a partir de ahora tendremos que estudiar los movimientos de la competencia”, asegura, dejando abierta la puerta a seguir los pasos dados por otras entidades europeas en este sentido, cobrando a los clientes “a partir de un determinado importe”. 

Respecto al difícil entorno que para el sector han dejado los tipos de interés en mínimos, Onur Genç coincide con el Banco Santander al señalar que, al menos para BBVA, el sistema no compensa del todo el impacto de los tipos negativos. “El ‘tiering’ tiene que ver con una base limitada de depósitos, de 10.800 millones de euros, y esa es una cantidad muy limitada sobre el balance total”, advierte el directivo. 

El banquero, que ha rechazado una nueva reducción de plantilla el próximo año a través de procesos de EREs, también descarta entrar en un nuevo proceso de fusiones. Asegura que la entidad está centrada “en crecer de forma orgánica”, aunque tampoco cierra la puerta a cualqueir operación con estratégico y financiero.