A LOS LEONES: Andrea Orcel (UBS) y Agustín Álvarez (Navantia)

Empresas A LOS LEONES

4 febrero, 2019 02:21

Orcel quiere lograr del Santander por la vía penal lo que no consiguió negociando con UBS

Andrea Orcel pretende adentrarse en una dura batalla legal contra el Santander tras su fichaje fallido como consejero delegado del mayor banco del país. Según publica el Financial Times, el banquero italiano busca un ejército de abogados para lanzarse en tromba contra los equipos jurídicos de Ana Botín. 

El objetivo es lograr que el Santander le indemnice por echarse atrás y renunciar a su fichaje, pese a que fue UBS quien puso la mayor parte de las trabas para que el italiano pudiera desembarcar en España. El hecho de que el banco suizo viera en la entidad española un competidor, es lo que hizo que se pusiera a la defensiva y decidiera no ceder en la negociación sobre la 'prima de fichaje' que debía recibir Andrea Orcel. 

La prima de fichaje es la parte proporcional que dejaría de ganar si se fuera de UBS por incorporarse al Santander y, en condiciones normales, podría haberse negociado. Sin embargo, las cosas se complicaron e hicieron que la ficha total: 54 millones, obligaran al Santander a dar marcha atrás. 

Aunque el Santander prefiere no pronunciarse sobre una posible demanda, aludiendo en parte a la confidencialidad del acuerdo alcanzado en su momento con el banquero italiano, deberá prepararse para lo que pueda venir. 

Ahora bien, la decisión adoptada por el consejo del Santander fue entendida no sólo por los dirigentes del banco, sino también por empleados y por algunos analistas. Es el caso, por ejemplo, de Bestinver, quien reconoce que el banco español le gusta más "sin Orcel que con Orcel". Y es que no a todos los inversores parecía convencerles la figura de un banquero de inversión como el italiano para dirigir el futuro de una entidad comercial como la española.

Agustín Álvarez (Navantia) sigue en el cargo pese a falsear su currículum durante 30 años

Navantia sigue sin destituir a Agustín Álvarez Blanco (Ferrol, 1963), el director de su astillero en Cartagena y del ruinoso programa de submarinos S-80, a pesar de que EL ESPAÑOL desveló el 15 de noviembre de 2018 que el directivo falseó su currículo durante 30 años y ocultó a la compañía que no era ingeniero naval.

Tras aquella información, la empresa pública anunció su destitución. Sin embargo, en la actualidad este alto cargo sigue apareciendo en el organigrama del comité directivo que Navantia muestra en su web corporativa. Según la empresa, su relevo "se ha pospuesto unos meses" debido a que la compañía se encuentra inmersa en un proceso de reestructuración de su plantilla que implica alrededor de 1.200 prejubilaciones. La medida afecta, en su mayoría, a empleados mayores de 61 años.

Álvarez Blanco, que dirige el astillero murciano desde julio de 2016, llevaba falseando su currículo académico desde 1989, cuando con 26 años entró a trabajar en la Empresa Nacional Bazán, germen de lo que hoy es Navantia. Desde entonces ha ocupado distintos cargos y en la actualidad forma parte del comité directivo de la compañía a nivel nacional.