Dia, que se ha dejado dos tercios de su capitalización bursátil desde los máximos alcanzados en 2015 y es uno de los valores con más posiciones cortas en Europa, ha visto como sus formatos clásicos perdían atractivo entre los consumidores, que ahora cuentan con una mayor oferta de proximidad.

La cuota de mercado de Dia, que cuenta con una de las menores rentabilidades por metro cuadrado en España, ha caído del 8,4% a principios de año hasta el 7,7% el 12 de agosto, según datos de la consultora Kantar Worldpanel.

En un intento por dar un giro a su imagen, Dia nombró un nuevo consejero delegado el mes pasado y ha anunciado que lanzará un nuevo plan estratégico antes de que finalice el año.

No obstante, la incertidumbre pesa en el futuro de la compañía, ya que se desconoce si su principal accionista, LetterOne, cuya participación directa e indirecta alcanza el 25%, lanzará en los próximos meses una oferta por toda la empresa.

El retroceso de Dia ha beneficiado a dos de sus principales rivales: el líder del mercado Mercadona y la alemana Lidl.

Mercadona ha crecido un punto porcentual en el mismo periodo y ahora acapara un cuarto del mercado de la alimentación en España. El grupo familiar valenciano se ha apoyado en una fuerte apuesta por los alimentos frescos y la reforma de tiendas.

La alemana Lidl continúa con su expansión y creció un 0,5 por ciento hasta una cuota del 4,8%, mientras avanza en su estrategia de convertirse en una tienda a la que el cosumidor recurre para hacer una compra completa desde un formato que atraía clientes esporádicos mediante productos reclamo.

El grupo francés Carrefour se mantiene en segundo lugar con un ligero retroceso del 0,3% a un 8,4% de cuota, compensando con nuevos formatos de proximidad la debilidad del formato hipermercado.