Por Rodrigo García, analista de XTB

El gigante español Indra presenta unas perspectivas bursátiles más que interesantes. Después de haber presentado unos excelentes resultados correspondientes al primer semestre de 2018, parece que los tiempos más oscuros para el valor forman ya definitivamente parte del pasado. El crecimiento del sector, el buen posicionamiento de la compañía y, sobre todo, las buenas perspectivas para la economía global siguen siendo factores que explican las expectativas de los inversores.

Desde un punto de vista técnico, la serie de máximos decrecientes que ha ido dibujando el valor desde finales del año pasado parece haber tocado su fin en los últimos meses. El giro en el precio, la señal alcista del MACD y el cambio de pendiente en la media de 30 sesiones confirmaban este hecho. Por si esto fuera poco, los buenos resultados vinieron acompañados de una fuerte caída de la volatilidad en el precio, que en valores como Indra, siempre anticipan continuación de las subidas de precio.

Ahora mismo, el precio se encuentra en una importante zona de confluencia. El nivel de 10,6 euros por acción, que ahora actúa como resistencia, ha sido el soporte más importante de los últimos meses. La más que probable superación de esa zona invita a buscar un gran y ambicioso recorrido alcista para Indra, cuyo objetivo se sitúa ahora mismo en los 12,50 euros por acción.