Así lo ha indicado la primera ejecutiva de la entidad durante la presentación de los resultados semestrales de Bankinter, que arrojó un beneficio de 261,2 millones de euros, un 8,4% superior al del mismo periodo del ejercicio precedente, al tiempo que ha aseverado que se trata de una medida "tan injusta" que seguramente no serán capaces de implementarla.

No obstante, Dancausa ha dicho que, si al final termina imponiéndose, la entidad se compromete a cumplirlo, aunque ha admitido que la capacidad de maniobra de Bankinter es "menor" a la de otros grandes bancos. Si se diera tal escenario, ha descartado un cambio de estructura legal o de sede.

"Imponer mayores cargas a un sector u otro es una desventaja y un tema de inequidad. De hecho, dentro del sector también hay muchas desigualdades, por lo que no me parece lo más oportuno", ha precisado la directiva.

Al igual que el resto de la banca española, Bankinter ha trasladado a la patronal, la Asociación Española de Banca (AEB), esta preocupación. De forma personal, Dancausa ha dicho que antes de que Pedro Sánchez fuera presidente le pidió que contara con su opinión en caso de que esta medida se llevara a cabo, si bien hasta la fecha no ha recibido ninguna llamada del jefe del Gobierno para abordar este asunto.

"Todos los bancos estamos alineados en esto. La banca no lo aguanta todo, ya tenemos bastantes retos que afectan al negocio, como la mayor carga regulatoria o los bajos tipos de interés, que afectan a la rentabilidad", ha explicado. "Los desafíos ya son sifucientes como para que nos impongan más", ha recalcado.

¿JUSTA CONTRAPRESTACIÓN?

Tal y como ha explicado Dancausa, la imposición de este nuevo impuesto se justifica por parte del Gobierno en que es una justa contraprestación al rescate del sector y a las ayudas públicas recibidas. "Esto es una simplificación absolutamente errónea", ha apostillado.

La primera ejecutiva de la entidad ha asegurado que Bankinter nunca ha recibido ayudas públicas, ni tiene activos fiscales diferidos ni alguna figura similar. Asimismo, ha proseguido explicando que su banco no ha participado en la reestructuración del sector financiero. "Somos independientes y autónomos", ha subrayado.

De hecho, ha recalcado que Bankinter ha contribuido "mucho" en el rescate, vía mayores aportaciones al Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) o a la Sareb, el 'banco malo' creado para que las entidades recatadas traspasarán ahí sus activos.

En esta línea, Dancausa ha dicho que es una "auténtica entusiasta" de que el Estado incremente su recaudación, pero a base de que ciudadanos y empresas ganen más. "Cualquier incremento tiene que basarse en la capacidad de la economía, si no, se acaba produciendo una mayor desigualdad, pobreza y se ahuyenta a los inversores, que buscan la seguridad jurídica", ha advertido.