Fuentes sindicales explicaron que tras más de doce horas de negociación se alcanzó un preacuerdo sobre el nuevo convenio a pocas horas de que terminase el plazo concedido por la matriz PSA.

Aunque no fue posible conseguir de manera inmediata detalles sobre el acuerdo, el medio regional Heraldo desveló que incluía, entre otros, cinco años de convenio, congelación salarial en 2018 y revalorización equivalente a un 50 por ciento de la inflación hasta 2020 y un 5 por ciento de reducción en los pluses por festivos y nocturnidad.

La empresa había advertido la semana pasada que el lanzamiento del nuevo Corsa en Figueruelas estaba en peligro por la falta de avances en las negociaciones de convenio para lograr mejoras de productividad en la planta.

La planta de Figueruelas cuenta con 5.300 empleados y trabajó el año pasado al 80 por ciento de su capacidad al fabricar unos 382.250 vehículos.

Según la empresa, Figueruelas es menos competitiva que las otras dos plantas del grupo PSA en España al contar con costes salariales más altos, menos horas de trabajo anuales y una menor flexibilidad.