Los títulos de la tercera mayor compañía metalúrgica del país asiático cayeron durante el primer tramo de negociación más de un 3 por ciento hasta rozar los 774 yenes (5,86 euros), aunque repuntaron más de un 2 por ciento hacia el final de la jornada y cerraron en 827 yenes (6,2 euros).
La empresa ha perdido más de un 40 por ciento de su valor bursátil desde que desveló el pasado día 7 que había detectado el falseo de datos de inspección para sus productos de aluminio, cobre, acero y hierro.
Estas prácticas fraudulentas se remontan a hace más de una década y afectan a, al menos, 16 productos vendidos a medio millar de empresas, algunas de ellas extranjeras, según ha revelado la investigación conducida por la propia empresa.
Las prácticas irregulares consistieron en la manipulación de los certificados de inspección para que pareciera que los datos técnicos cumplían los requisitos, en la falsificación de etiquetados o incluso en obviar inspecciones, según admitió el presidente de Kobe Steel, Hiroya Kawasaki, en una rueda de prensa celebrada el pasado viernes.
El alcance del escándalo podría continuar expandiéndose en los próximos días, dado que la investigación todavía está abierta y no se han revisado todas las áreas de actividad de esta empresa que opera en los sectores de los materiales, la energía eléctrica y la maquinaria.