Bayer informó hoy de que la venta incluye el negocio de glufosinato de amonio, que es un herbicida, y las actividades con algunas semillas, que en ambos casos generaron unas ventas de 1.300 millones de euros en 2016.

La venta depende de que Bayer logre cerrar la adquisición de Monsanto.

BASF se compromete a mantener todos los empleos fijos transferidos hasta, al menos, tres años después del cierre de la operación.

"Somos activos para afrontar posibles preocupaciones reguladoras con el objetivo de facilitar el cierre de la transacción con Monsanto", dijo el presidente de Bayer, Werner Baumann.

La venta de parte del negocio de fitosanitarios a BASF también debe ser aprobada por las autoridades de defensa de la competencia. EFECOM

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