Por Joyce Lee y Yuna Park

El líder de facto de uno de los mayores grupos industriales de Asia pagó sobornos a cambio de los favores de la entonces mandataria Park Geun-hye, según un fallo histórico de una corte de Seúl, que también lo declaró culpable de ocultar activos en el extranjero, malversación y perjurio.

Lee, de 49 años de edad, había estado detenido desde febrero acusado de sobornar a Park para cimentar su control de un conglomerado propietario de Samsung Electronics y cuyos intereses van desde los teléfonos inteligentes al negocio biofarmacéutico.

Lee negó haber cometido un delito. Uno de sus abogados, Song Wu-cheol, dijo que su cliente apelará al fallo de primera instancia de la corte.

"Todo el veredicto es inaceptable", dijo Song, y agregó que confía en que la inocencia de su cliente será confirmada por un tribunal superior.

Según la ley surcoreana, las condenas de más de tres años no pueden ser suspendidas. La sentencia de cinco años es una de las penas de prisión más largas dictadas contra un líder empresarial surcoreano.