El PP ha enviado este viernes al Gobierno una propuesta para cerrar un acuerdo político y devolver a los ciudadanos españoles de rentas medias y bajas cerca de 15.000 millones de euros. El partido liderado por Alberto Núñez Feijóo pedirá a Pedro Sánchez rebajas fiscales en el IRPF, IVA y Sociedades por importe de entre 7.500 y 10.000 millones de euros, además de gestionar otros 4.900 millones de euros procedentes de los fondos Next Generation EU como incentivos o créditos fiscales para acelerar su ejecución.

En un encuentro con la prensa, el nuevo vicesecretario de Economía del PP, Juan Bravo, ha explicado que este documento es "una propuesta" abierta a las modificaciones que el Gobierno estime necesario hacer para alcanzar un acuerdo.

Son medidas adicionales al plan de choque del Gobierno contra la guerra de Ucrania. De este modo, si el Ejecutivo hace un guiño al PP se podría plantear una negociación que incluyera el apoyo parlamentario de los populares a esas medidas del Gobierno, según fuentes del PP.

El documento titulado Plan de medidas urgentes y extraordinarias en defensa de las familias y la economía de España tiene cuatro pilares: una rebaja de impuestos, una simplificación de trabas administrativas y burocráticas, una reducción del gasto de las Administraciones públicas y una reformulación de los fondos europeos para agilizar su ejecución.

Bravo ha señalado que en este proyecto han trabajado más de 25 personas y ha calificado de "sensatas" las propuestas que incorpora el texto final con el que el PP quiere abrir "una negociación" con Moncloa. Entre ellas hay exministros, consejeros autonómicos, diputados, senadores y personas del sector privado, entre las que hay nombres anónimos que no son del PP. 

El nuevo vicesecretario de Economía del PP, Juan Bravo.

La rebaja fiscal se articula sobre la premisa de que la AIReF estima que se van a recaudar 18.000 millones de euros extra este año, un aumento de ingresos que el Gobierno prevé que se limite a 9.000 millones de euros.

El PP quiere devolver ese dinero a los ciudadanos, pero con una propuesta centrada en las rentas bajas y medias, ya que es consciente de que en un contexto de inflación no ayudaría dar más dinero a las clases más altas para que consuman más (dado que es necesario reducir la demanda para mitigar las subidas de precios).

Ayudas en el IRPF

Así, la propuesta en el IRPF se articula en tres pilares. En primer lugar, para las rentas de hasta 14.000 euros (17.000 euros con dos hijos), se propone devolver entre 200 y 300 euros anuales mediante un impuesto negativo similar al que ya existe para colectivos como las familias numerosas.

En segundo lugar, la propuesta va dirigida al colectivo de hasta 22.000 euros aplicando un nuevo mínimo personal y familiar temporal. En este caso, la ayuda sería inferior a la del primer colectivo.

El tercer punto, iría dirigido a rentas de entre 22.000 y 42.000 euros y consistiría en deflactar la tarifa en los tres primeros tramos. El PP explica que si un trabajador logra una subida de sueldo para compensar la inflación y cambia de tramo, paga más impuestos, con lo que no mejora su poder adquisitivo. 

Agilizar la entrega

La prioridad de esta propuesta fiscal sería hacer llegar al bolsillo del ciudadano lo antes posible esas devoluciones que si se espera a la Renta de este año, no se entregarían hasta 2023, cuando se espera que la situación económica sea más favorable.

Las estimaciones, ha reconocido Bravo, no son exactas, ya que para ello sería necesario utilizar los datos de la Agencia Tributaria a las que no tiene acceso, con lo que sería el Gobierno el que tendría que terminar de perfilarlo.

Autónomos y empresas

Para los autónomos, el PP propone actuar sobre los módulos para compensar las subidas de suministros, como la luz. También pone sobre la mesa medidas que afecten a los pagos fraccionados, como ya ha hecho Navarra.

Para las empresas, el documento pide al Gobierno utilizar las cuantías que se quedaron sin ejecutar de los 7.000 millones de ayudas directas que se aprobaron durante la pandemia. Eso sí, ejecutarlas con un mecanismo diferente para que esta vez se gaste el dinero.

En materia de IVA, el PP va a pedir al Gobierno agilizar la transposición de la directiva europea que se ha aprobado para poder bajar este impuesto al componente energético hasta el 5%. En este asunto, contaría con su apoyo.

Fondos europeos

Como ya avanzó Alberto Núñez Feijóo, la propuesta también incorpora un cambio en el reparto de NGEU para imitar lo hecho por Francia e Italia que están ejecutando los fondos europeos mediante incentivos fiscales y créditos monetizables.

En este caso, el ciudadano o la empresa ejecutaría el dinero, el Estado entregaría la ayuda y después, se comprobaría que todas las facturas estuvieran en orden.

"Los fondos europeos no están siendo lo suficientemente ágiles. No es una crítica", ha afirmado Bravo. 

La propuesta incorpora también que las empresas puedan decidir con libertad cuándo amortizan las inversiones en Sociedades. Esto supondría que el Estado adelantaría un dinero, pero no tendría impacto presupuestario a medio plazo.

Recorte de gasto

La propuesta del PP también menciona la necesidad de recortar "gasto político", pero Bravo no ha querido entrar al detalle de cómo ejecutar esa parte del plan. No obstante, ha puesto casos concretos como ejemplo de cómo lograr una mayor eficiencia del gasto público.

Además, pone sobre la mesa la necesidad de reducir el gasto burocrático para facilitar la vida a las empresas, en especial, cuando se trate de acceder a las ayudas de NGEU.

Bravo ha explicado los detalles de esta propuesta en la sede de Génova a la prensa. Pero ahora esperan que el Gobierno de una respuesta para "negociar" este plan que se centra en rebajas fiscales centradas en las clases medias y trabajadoras, así como en pensionistas -ya que también ellos disfrutarían de pagar menos impuestos-, según el PP.