Gijón, 19 dic (EFECOM).- El nuevo propietario de la factoría de Vauste Spain en Gijón, el grupo DSA, con sede en Emiratos Árabes, ha trasladado este jueves a los representantes de la plantilla su proyecto para la compañía que pasa por impulsar el crecimiento de su negocio industrial, dedicado a producir sistemas de amortiguación para la industria automovilística y componentes de magnesio para diversos sectores.

Según ha informado la empresa, el equipo liderado por Fernando Sáez ha señalado que el principal objetivo es impulsar el crecimiento del negocio industrial de Vauste "aprovechando su extraordinario potencial, tanto en la experiencia y especialización de sus profesionales, como en la solvencia y excelencia en el desarrollo de productos para el sector de la automoción y otros sectores".

Así, la estrategia industrial y el plan de inversiones van dirigidos a la actualización de la gama de productos y procesos industriales de Vauste y al apoyo a su estrategia comercial de ofrecer productos de alta calidad y flexibilidad productiva para responder a las exigencias del mercado tanto en su línea de negocio de amortiguadores y ejes como en la de fabricación de componentes de magnesio.

Para el responsable de Relaciones Institucionales de DSA, Lucio Gómez, su objetivo es potenciar las grandes ventajas de Vauste para convertirla en un proveedor de referencia para la automoción a través de su línea de amortiguadores y ofrecer productos de alta valor añadido en la fabricación de componentes de magnesio para la industria de la automoción, la ferroviaria, la aeroespacial, de defensa, sanitaria y electrónica, entre otras.

El fondo de inversión industrial alemán Quantum Capital Partners vendió a finales de noviembre la planta de amortiguadores y componentes de magnesio de Vauste en Gijón (antigua Tenneco), que cuenta con 132 empleados, al grupo DSA, con sede en Emiratos Árabes.

Quantum, especializado en la compra de compañías con alto potencial de mejora operativa, crecimiento y desarrollo, adquirió la planta de Tenneco en abril de 2016, en una operación en la que se comprometió a mantener la actividad y su plantilla durante tres años.

En este tiempo, la factoría especializada en la fabricación de sistemas de amortiguación diversificó su actividad con la producción de componentes de magnesio para las industrias de automoción, ferroviaria, aeroespacial, de defensa, sanitaria y electrónica.