Madrid, 15 oct (EFECOM).- El director de Innovación del Grupo Santander, Juan Jiménez Zeballos, ha defendido este martes que la segmentación tradicional que los bancos hacen de sus clientes es "algo del pasado", puesto que la tecnología ya permite ofrecer un servicio VIP y personalizado.

"No podemos ofrecer a cada cliente un servicio de 'red carpet' (alfombra roja) poniéndoles un banquero o un asesor financiero a cada uno, pero sí con tecnología", ha explicado Zeballos en una jornada organizada en Madrid por la consultora tecnológica Globant.

Y ha agregado que la gestión masiva de datos permite por ejemplo evaluar la propensión de un cliente a pagar un determinado precio por algo, de manera que empresas como Amazon pueden cobrar cantidades diferentes por un mismo producto en función del perfil del comprador.

En ese sentido, ha apuntado que el 90 % de lo que se ve a través de Netflix es elegido por su algoritmo de búsqueda (que personaliza la oferta para cada usuario), pese a que el cliente tiene la sensación de haber elegido libremente lo que quería ver.

Según el responsable de transformación digital de Santander, el cliente tiende a esperar de su relación con su banco experiencias similares a las que tiene navegando con su tableta: "más contextual y adaptada a sus necesidades".

Para Zeballos, la atención hay que dirigirla a la experiencia del usuario, y para ello hay que tener en cuenta que son muy diferentes entre sí y espera ofertas acordes a su perfil.

"Las nuevas generaciones le han perdido un poco el respeto al dinero" y "la robustez, el capital o la solvencia (del banco) les importa poco", según el directivo, que asegura que priman más la inmediatez y la gratuidad.

"La diferenciación y la 'customización' son claves", ha resumido Zeballos, que también considera primordial la colaboración entre bancos para que el movimiento del dinero sea tan dinámico como el de otros bienes y servicios.

Al respecto, el directivo ha bromeado asegurando que el tiempo que tarda en reflejarse en la cuenta bancaria una transferencia internacional no es porque el banco quiera quedarse con el dinero para "calentarlo", como se dice popularmente.