El Gobierno italiano calculó hoy que la economía del país crecerá un 0,2 % durante 2019, frente al 1 % que preveía a finales del año pasado, pero prometió que con sus planes de reformas respetará los objetivos fijados por Bruselas.

El Consejo de Ministros del Gobierno del populista Movimiento 5 Estrellas y la ultraderechista Liga aprobó el Documento de Economía y Finanzas (DEF), que incluye la previsión macroeconómica para el año en curso y los objetivos para el próximo trienio y que deberá ser aprobado por el Parlamento antes del 30 de abril.

El documento revisa drásticamente a la baja la previsión de crecimiento de Italia, calculado en un 0,2% para este año, en un país que entró en recesión técnica a finales de 2018 tras acumular retrocesos de un 0,1% del producto interior bruto (PIB) en el tercer y cuarto trimestre del pasado ejercicio.

El Ministerio de Economía italiano apunta una senda alcista y, aunque cree que en 2019 el PIB italiano crecerá un 0,2%, desde 2020 lo hará en un 0,8%, mismo dato para 2021 y 2022.

Esta cifra actualizada se acerca a la vaticinada por la Comisión Europea (0,2%), el Fondo Monetario Internacional (0,1%) o la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (-0,2%).

El déficit en 2019 alcanzará el 2,4% del PIB, a pesar de haber acordado con Bruselas que sería del 2,04%, pero el Gobierno señaló que teniendo en cuenta la flexibilidad acordada "el resultado de entraría en los límites del Pacto de Estabilidad y Crecimiento".

Además, el déficit iría a la baja, pasando al 2,1% en 2020; al 1,8% en 2021 y al 1,5% en 2022, mientras que la deuda pública se situará en el 132,6% del PIB en 2019 para emprender "una reducción significativa" que lo dejará en el 130,2% en 2021.

También pronostica un aumento de las inversiones públicas a lo largo del próximo trienio en Italia, que pasará del 2,1% del PIB de 2018 al 2,7% en 2022.

A pesar de esta drástica reducción de las previsiones, el Gobierno avanzó que no se introducirá ningún impuesto nuevo ni se realizarán modificaciones a los Presupuestos Generales.

El DEF, además, confirma que en los planes de reformas que Roma quiere sacar adelante serán en "respeto a los objetivos fijados por la Comisión Europea", con la que Roma mantuvo un pulso sobre la deuda con la que financiará sus política.

En este sentido el Gobierno de Roma considera "necesario" un cambio en la Unión Europea sobre el modelo de crecimiento que, sin que perjudique a la competitividad a los países miembro, se base "mayormente sobre la promoción de la demanda interna".

Por eso Italia "promoverá una revisión de política económica y de las reglas sobre el presupuesto de la política industrial, comercial, de las inversiones y de la innovación" en la UE.

La reunión del Consejo de Ministros estuvo precedida por una larga reunión entre las dos fuerzas políticas del Gobierno para hacer números y poder impulsar la "flat tax" o impuesto único que exige la Liga de Matteo Salvini.

A la salida, Salvini, viceprimer ministro y ministro del Interior, dijo que su opinión sobre el DEF es "positiva" y que la "flat tax se hará", una de sus principales reclamaciones junto a la Reforma del Sistema de Pensiones incluido ya en marcha.

El documento, según los medios, también incluye indemnizaciones para los clientes de las bancas quebradas en los últimos años.