Londres, 3 abr (EFECOM).- El Banco Santander ha presentado este miércoles su nuevo plan estratégico para los próximos años, que pone el foco en agilizar la digitalización con todo su poderío económico y mejorar sus objetivos de rentabilidad, ahorro de costes y dividendo, entre otras cosas.

Así lo han explicado hoy en el Investors Day que celebran cada año en Londres la presidenta de la entidad, Ana Botín, el consejero delegado, José Antonio Álvarez, y el resto de los principales directivos del banco, que han hecho un repaso de los grandes objetivos del grupo para los próximos ejercicios.

En su intervención, Ana Botín ha anunciado, entre otras cosas, que Santander invertirá más de 20.000 millones de euros en acelerar la transformación digital y tecnológica en los próximos cuatro años para mejorar la experiencia de sus clientes, aumentar su confianza y vinculación y reducir costes.

A medio plazo, el banco espera elevar la cifra de clientes digitales a 50 millones y la de clientes vinculados a 26 millones.

También ha elevado el objetivo de "pay out" o porcentaje de beneficio que se destina a retribuir a los accionistas hasta una horquilla que va del 40 al 50 %.

Asimismo, ha explicado el nuevo plan estratégico, que pretende, entre otros objetivos, elevar la rentabilidad, dejar el ratio de eficiencia por debajo del 45 % y lograr un ahorro de costes anual progresivo de 1.200 millones de euros, de los cuales un 10 % se lograrían en Europa.

Para llevar a cabo esta estrategia, el banco ha anunciado hoy una estructura directiva más sencilla para Europa, Sudamérica y Norteamérica, además de un comité de dirección más reducido -pasa de 24 a 12 miembros- con mayor foco de negocio, que permitirá una mejor y más rápida ejecución en todo el Grupo.

Además, el Santander ha adelantado que tiene previsto lanzar Openbank, el banco 100 % digital del grupo, en diez nuevos mercados "a medio plazo", hasta alcanzar los dos millones de clientes.

Y dentro de su oferta digital, el Santander lanzará una plataforma abierta de servicios financieros, con el foco en los pagos, un sector con un crecimiento esperado de ingresos en torno al 9 %.

Asimismo, la entidad ha detallado sus objetivos de negocio país por país y, respecto a España, el consejero delegado del Santander, José Antonio Álvarez, ha asegurado que la integración del Banco Popular va más rápido de lo previsto y que espera ahorrar 250 millones de euros adicionales, además de los 500 millones que estaban previstos.

Santander "ve oportunidades en financiación al consumo, pagos, seguros y gestión de patrimonios" en España, donde prevé un retorno sobre el capital tangible (ROTE) ordinario del 14-16 %, frente al 11 % de 2018.

En México, el principal motor de las cuentas del Santander, el banco aspira a seguir creciendo en particulares, y mantener el liderazgo en pequeñas y medianas empresas (pymes) y grandes empresas.

En este mercado ha fijado un ROTE ordinario entre el 19 y el 21 %, en tanto que en Brasil, un país con un "alto potencial de crecimiento" para el Santander, la entidad espera superar el 20 % de ROTE ordinario que ya alcanzó en 2018.

Respecto a Europa, el Santander calcula un ahorro de más de 700 millones de euros en costes, de los que 500 millones provendrán de su transformación digital, en tanto que quiere aumentar su base de clientes vinculados y digitales, y elevar la cuota en todos los mercados principales en los que opera.

También aspira a alcanzar un ROTE ordinario entre el 12 y el 14 % frente al 11 % de 2018; un porcentaje que se eleva hasta el 20-22 % en el caso de Latinoamérica, donde el Santander quiere un crecimiento de ingresos "alto y sostenible".