La farmacéutica Reig Jofre obtuvo en 2018 unos beneficios netos de 9,25 millones de euros, un 5% más que el año anterior, y los ingresos se elevaron un 7%, hasta los 180,5 millones, impulsados por la buena evolución de línea de complementos nutricionales.

La compañía cerró así un ejercicio positivo, en el que la línea de complementos nutricionales Forté Pharma consiguió un incremento de las ventas del 35% y las de antibióticos e inyectables liofilizados del área de tecnologías farmacéuticas llegaron a acuerdos internacionales relevantes, según ha señalado la firma en un comunicado.

El ebitda (beneficio antes de intereses y amortizaciones) tuvo también una evolución positiva, al crecer el 4%, situándose en los 16,4 millones.

Por su parte, la inversión productiva llegó a los 15,9 millones de euros, de los que 7,5 fueron destinados a la nueva planta de liofilizados de Barcelona, y la inversión total fue de 21,7 millones.

En el capítulo de los gastos, los de personal crecieron un 6% debido al refuerzo de las estructuras comerciales en países como Francia y los otros costes de explotación aumentaron un 11%.