Deoleo cerró el ejercicio 2018 con pérdidas de 291 millones de euros tras ajustar a la baja el valor de sus activos, lo que sitúa a la compañía en quiebra técnica al reducir su patrimonio neto por debajo de la mitad de su capital social.
El deterioro de los activos ascendió a 238 millones de euros, aunque, según ha apuntado la compañía en el informe de resultados anual enviado hoy a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), este "ajuste contable no tiene impacto sobre la situación de liquidez del grupo".
Para dejar de encontrarse en quiebra técnica (figura llamada formalmente "causa de disolución"), el Consejo de Administración ha asegurado que "implementará las medidas necesarias para restablecer el equilibrio patrimonial" en los plazos establecidos por ley, que obliga a convocar la junta de accionistas en un período inferior a dos meses.
La facturación neta de la compañía bajó un 12,5 %, hasta los 605 millones de euros, y el resultado bruto de explotación (Ebitda) acabó el año en 15,4 millones de euros, un 50 % inferior al de 2017.
Desde la empresa han apuntado que uno de los factores que han afectado a su Ebitda ha sido "la pérdida de márgenes en Estados Unidos asociada a las inversiones extraordinarias realizadas para reaccionar a una situación de mercado provocada por algunos competidores, más centrados en el volumen que en la calidad".
Por volumen de ingresos se registraron caídas en todos los mercados: España cerró el ejercicio en 286 millones en ventas (-11 %), Estados Unidos y Canadá, en 129 millones (-14 %); y el norte de Europa, en 70,5 millones (-12 %).
En el resto de países donde comercializa aceite, su facturación retrocedió un 5 %, hasta los 106 millones.
A este retroceso también ha contribuido la caída de los precios de venta derivados de la expresiva reducción de los precios en origen del aceite, que rondó el 30 %.
La deuda financiera neta, por su parte, se situó en 550 millones de euros a 31 de diciembre, un 1 % menos que a cierre del ejercicio anterior.
Deoleo informó ayer del cese de Pierluigi Tosato como presidente y consejero delegado de la entidad -aunque continúa como miembro del Consejo de Administración-, cargos que ocupará Miguel Ibarrola.