Iberdrola espera obtener un beneficio neto de entre 3.700 y 3.900 millones de euros en 2022 -un 30 % más que en 2018- y un resultado bruto de explotación (ebitda) de más de 12.000 millones, según la actualización de perspectivas estratégicas para el periodo 2018-2022 que ha presentado este martes.

En las anteriores previsiones, la compañía estimaba que en el periodo su beneficio neto se situaría entre los 3.500 y los 3.700 millones de euros.

Iberdrola superó en 2018 por primera vez los 3.000 millones euros de beneficio neto anual, al alcanzar un resultado de 3.014 millones de euros el año pasado.

Con los nuevos resultados previstos, Iberdrola espera cumplir su compromiso de incrementar la retribución al accionista en línea con la evolución de los resultados.

Iberdrola fijará mínimos anuales crecientes, que llegarán a un suelo de 0,40 euros brutos por acción en 2022.

El plan de rotación de activos no estratégicos ascenderá a 3.500 millones de euros en el periodo, frente a los 3.000 millones anunciados en las perspectivas presentadas el año pasado.