Mehrad Mahdjoubi es el inventor de esta ducha de circuito cerrado.

Mehrad Mahdjoubi es el inventor de esta ducha de circuito cerrado.

Investigación

Esta ducha ahorra un 90% del consumo de agua y un 80% de energía

Oas es una ducha inteligente desarrollada por uno de los candidatos al premio Inventor del Año 2018 de la Agencia Europea de Patentes que permite completar el baño consumiendo tan sólo 5 litros de agua gracias a sus sistema de filtrado y circuito cerrado

7 noviembre, 2018 13:00

La propuesta de Orbytal Systems es casi espacial: una ducha de circuito cerrado que emplea un 80% menos de energía y un 90% de agua que una ducha tradicional gracias al filtrado y reciclado del agua consumiendo, además, tan sólo 5 litros por lavado. Pero no es hablamos de una idea ni de un proyecto labarotario. Oas, que es como se llama esta innovadora ducha, es ya un producto comercial, una especie de kit de baño que se instala en cualquier casa por fontaneros habituales  y que le ha valido al joven diseñador sueco Mehrad Mahdjoubi la nominación a inventor del año en la categoría de pymes por parte de la Agencia Europea de Patente.

La idea viene de lejos, cuando Mahdjoubi estaba trabajando en el proyecto Journey to Mars de la NASA. Ahí decidió aplicar lo aprendido para diseñar esta ducha. “Las duchas convencionales en Europa rocían alrededor de 10 litros de agua por minuto, lo que representa aproximadamente un tercio del agua doméstica diaria e incluso más”, explica el inventor. Sin embargo, de todo el tiempo que pasamos en la ducha, solo durante un tramo esta entra en contacto con el jabón el champú. Así, la mayoría del agua termina marchándose por el desagüe más o menos limpia.

La ducha de Mahdjoubi tiene ventajas obvias tanto en lugares donde el agua es escasa, como las zonas afectadas por sequías extremas, y también donde se ducha mucha gente, como gimnasios, hospitales y piscinas públicas.  De hecho, sus principales clientes son cadenas hoteleras y promotaras encargadas de la construcción de nuevos edificios.
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Pero, ¿cómo lo hace? Los sensores de Oas analizan la calidad del agua de la misma manera que lo hacen las centrales nucleares, al medir su conductividad (los contaminantes hacen que el agua sea más conductora), lo que se convierte en el punto de referencia del sistema. El agua en el sistema se mide 20 veces por segundo contra este punto de referencia y cualquier agua que esté demasiado contaminada para purificarse se elimina automáticamente.

El resto se purifica bombeando el agua a través de dos filtros: uno de micras que elimina partículas más grandes como el cabello y la suciedad, y un filtro UV que neutraliza los microorganismos, incluidas las bacterias, los virus y la sangre. El agua siempre se esteriliza antes de salir de la ducha. Y antes de que vuelva a la ducha, pasa por un calentador; como la temperatura del agua desciende solo unos pocos grados entre la ducha y el desagüe, requiere muy poca energía para recalentarla.  

El agua eliminada por el sistema o salpicada de la ducha se reemplaza automáticamente. Al final del baño, el agua se elimina y se da paso a la carga de un suministro nuevo para la siguiente persona que vaya a bañarse. Y además una aplicación rastrea el uso y le dice a los propietarios cuándo se deben cambiar y devolver los filtros de la ducha para reciclarlos.

"Podríamos haber seguido investigando para intentar crear una ducha que recuperase el 100% del agua", cuenta el inventor, que presenta la suya como la más eficiente del mercado. Sin embargo, las cifras de ahorro de consumo hidráulico y energético son "las que tienen sentido desde un punto de vista económico", tanto para la empresa como para el consumidor que debe pagar ella. 

Más limpia que el agua del grifo

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Según la ONU, la escasez de agua afecta actualmente a más de dos mil millones de personas, o lo que es lo mismo, casi una cuarta parte de la población mundial. Desde el lanzamiento de su sistema, Orbital Systems estima que ha ahorrado más de 12 millones de litros de agua. Y para refrendar esta apuesta que quiere luchar contra este problema de alcance global, los estudios realizados por el Instituto Sueco para el Control de Enfermedades Transmisibles han encontrado que el agua filtrada por Orbytal Systems es más limpia que el agua del grifo. 

Una ventaja adicional, explica el creador, es que la experiencia del usuario de Oas es mejor que la de una ducha normal. Si alguien usa agua en otro lugar de la casa, la presión y la temperatura de una ducha convencional pueden fluctuar. Pero debido a que Oas es un sistema de circuito cerrado con funcionalidad de corrección, el curso del agua, que funciona como un circuito cerrado, no está sujeto a esas fluctuaciones. 

Fundada en 2012 como una pequeña empresa con sede en Malmö, Orbital Systems ya ha recaudado 25 millones de euros en inversiones, incluyendo el respaldo de Karl-Johan Persson, CEO de H&M (Hennes & Mauritz), y Niklas Zennström, cofundador de Skype Technologies.  Dados los pequeños números de producción, una unidad de este sistema cuesta más de 3 000 euros, por lo que de momento parece solo accesible para los clientes más VIP, pero Mahdjoubi espera que el coste de la ducha y los filtros (unos 50 euros) disminuyan a medida que aumenta la producción.  En el próximo par de años, Mahdjoubi predice que el sistema debería costar aproximadamente unos 500 euros.