Es cierto que hay elecciones autonómicas el próximo mayo y que podría ser que los actuales responsables de la estrategia innovadora de la región tuvieran que ceder el testigo a otros, pero con la presentación del calendario de subvenciones se garantiza que esa estrategia tendrá continuidad. Y más, teniendo en cuenta que sólo tres de esas convocatorias están previstas para después de verano.

En cualquier caso, más allá de lecturas políticas, queda claro que Asturias tiene muy claro hacia dónde quiere ir. Y la mejor forma de comprobarlo es, precisamente, observar cada una de las temáticas que conforman las diferentes líneas de ayudas.

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El calendario, presentado hace unos días, supone una herramienta fundamental para el ecosistema científico y tecnológico asturiano, ya que incluye las fechas de inicio y final de las convocatorias y la estimación del periodo en el que se resolverán.

Estas líneas de ayudas financiadas por las Consejerías de Ciencia, Innovación y Universidad, y de Industria, Empleo y Promoción Económica; y cofinanciadas, algunas de ellas por Fondos Europeos, a través de los Fondos Feder y los Fondos de Transición Justa serán las primeras que gestionará la nueva Agencia de Ciencia, Competitividad Empresarial e Innovación, actualmente en periodo de constitución.

A estos programas se sumarán en los próximos meses las ayudas de apoyo a la investigación y recursos humanos para la retención y atracción de talento.

Además, la Consejería de Ciencia e Innovación ultima la puesta en marcha de la agencia, prevista para antes de junio, con el compromiso de que en este periodo de transición no se paralice convocatoria alguna.

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De hecho, a las ayudas del Idepa, se suman otras para la creación de consorcios para el hidrógeno verde, la convocatoria de subvenciones para la difusión de la I+D+i y las ayudas para la movilidad internacional de investigadores del programa Severo Ochoa.

Este año se incorporan al catálogo del Idepa tres nuevas convocatorias que evidencian cómo Asturias quiere adaptarse a las nuevas necesidades empresariales. Así, se ha convocado una ayuda de proyectos de I+D+i para la hiperautomatización empresarial.

El objetivo de la convocatoria, dotada con 500.000 euros, es favorecer la realización de proyectos de I+D+i que permitan a las firmas asturianas incrementar la automatización de procesos, usando la inteligencia artificial y la robótica.

Otra de las novedades son las ayudas a proyectos tractores de inversión en el ámbito de la transición ecológica. Esta convocatoria está dotada con un millón y pretende incentivar proyectos de inversión vinculados con la transición ecológica de la industria, la cadena de valor de las renovables, el almacenamiento energético y el hidrógeno verde, etcétera.

La última de las novedades son los proyectos tractores de inversión para la diversificación. Se trata de subvenciones a fondo perdido para favorecer proyectos de inversión vinculados con la diversificación y alineados con la transformación ecológica de la industria. La convocatoria está dotada con un millón de euros.

El resto de convocatorias mantienen el esquema del pasado año, con algún incremento en las dotaciones.

Así, se destinarán 6,4 millones en ayudas para impulsar iniciativas de investigación, desarrollo e innovación en el marco de la estrategia de Especialización Inteligente S3. A través de esta línea, el Principado pretende facilitar el acceso de las empresas a la investigación industrial, el desarrollo experimental o los estudios de viabilidad.

También persigue mejorar los vínculos y sinergias entre las compañías y los centros de investigación, así como la transferencia de tecnología.

Otros programas

Por su parte, el programa de movilidad de recursos humanos entre empresas y ámbito académico está dotado con 200.000 euros y favorece la movilidad entre empresas y centros de generación de conocimiento y viceversa, mediante la transferencia de conocimiento para realizar proyectos de investigación industrial que favorezcan el desarrollo de iniciativas relacionadas con la S3.

El impulso a la tecnología tiene un papel fundamental en el calendario de ayudas asturiano. Así, se abrirá una convocatoria para la creación y consolidación de empresas de base tecnológica (EBT). Con un presupuesto de 1,7 millones, esta convocatoria se dirige a empresas cuya actividad se centra en la explotación de productos que requieran el uso de tecnologías o conocimientos desarrollados a partir de la actividad investigadora.

El apoyo a la innovación y a la transformación digital de las pymes es otro de los objetivos de diferentes convocatorias. Lo demuestran, por ejemplo, las ayudas a la transformación digital: desde el hub de innovación digital AsDIH se ofrecerán todos los apoyos necesarios para llevar a cabo el proceso, con una dotación de 1.250.000 de euros.

Por su parte, los cheques de innovación, una línea dotada con 400.000 euros, se orientan al asesoramiento tecnológico, digitalización de la empresa, consultoría para la certificación y diseño.

En definitiva, una gran cantidad de apuestas públicas para ayudar a las empresas que también incluye el apoyo a viveros de empresas, a centros privados de I+D+i, a inversión inicial en pymes, a desarrollo empresarial, financiación, promoción internacional, creación de empleo en empresas tractoras, inversión en economía circular, financiación de clústeres regionales y ayudas a ayuntamientos para mejorar áreas industriales.