El efecto del anuncio de la la empresa biotecnológica Oryzon de abandonar su sede de Cornellá de Llobregat, en Barcelona, para trasladarse a Madrid, ante la situación que se vive en Cataluña, ha sido fulgurante. Las acciones de la compañía han abierto la sesión bursátil a 2,35 euros, tras cerrar ayer a 1,79 euros, lo que supone una subida superior al 30%.

A última hora de este martes, la empresa comunicaba, en un hecho relevante ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que “con el fin de optimizar sus operaciones y la relación con los inversores, el Consejo de Administración de Oryzon ha acordado trasladar su domicilio social actual, en Cornellá de Llobregat, Barcelona, a Madrid, donde se establece su efectiva administración y dirección", decía la nota enviada por la empresa al supervisor bursátil. 

Una reforma legal atribuyó hace dos años a los consejos de administración de las empresas la facultad de trasladar su sede social a cualquier lugar dentro del territorio nacional. Hasta ese momento, el consejo solo podía trasladar la sede dentro del mismo municipio y era necesaria la aprobación de la junta de accionistas para moverse a otro municipio. 

Oryzon, fundada en el año 2000 en Barcelona, se ha convertido en una biofarmacéutica de fase clínica líder europea en el ámbito de la epigenética. Dispone de una fuerte plataforma tecnológica para la identificación de biomarcadores y dianas terapéuticas para enfermedades oncológicas y neurodegenerativas. La compañía tiene oficinas en Barcelona y Cambridge, en el Estado de Massachusetts, en Estados Unidos.