Javier Tebas, presidente de la Liga, cierra los últimos flecos para lanzar antes del primer trimestre de 2018 el nuevo concurso por los derechos de televisión la Liga de Fútbol. Será la segunda venta centralizada de la historia del fútbol español y nuevamente el objetivo será elevar el precio para acercarse a la Premier League, que recaudó 7.000 millones -más de 2.000 millones por cada temporada- tras la venta del paquete a BT y Sky.



Tebas fue el precursor de la ley que permitió a los clubes de fútbol vender de manera conjunta sus derechos de televisión y no individualmente como se venía haciendo históricamente. Con ello la Liga se aseguraba terminar con las guerras del fútbol y, por otro lado, aumentaba el precio de las subastas al tener un interlocutor único en la venta.



El Real Decreto-ley 5/2015, de 30 de abril, de medidas urgentes hizo oficial la comercialización conjunta de los derechos de explotación de contenidos audiovisuales de las competiciones de fútbol profesional. Los clubes se pusieron de acuerdo en la temporada 2015- 2016 para vender sus derechos de manera conjunta, pero todavía sin el amparo de la ley, facturando 1.100 millones en un año.



Tebas quiere subir la apuesta



Por su parte, el primer contrato de venta centralizada -en vigor desde la temporada 2016-2017- significará una facturación de 1.500 millones de euros por año, un tercio de la venta internacional y casi el doble que los 845 millones que se ingresaron los clubes vendiendo sus derechos por separado en la temporada 2014-2015, según consta en la Memoria Económica de la Liga.



Pero Tebas quiere seguir subiendo la apuesta. EL ESPAÑOL publicó en octubre que la nueva subasta sería al alza y por encima de los 1.000 millones en España, una información que confirmó el Presidente de la Liga hace un par de semanas. La nueva meta es conseguir 2.300 millones de euros anuales, de los que 1.300 millones se deberían recaudar solo en España. Esto supondría valorar el paquete por las tres temporadas en 6.900 millones de euros y acercarse al contrato de la Premier del año 2015.

No obstante, los intereses de Tebas pueden chocar con el plantón de los operadores de Televisión. Telefónica, Vodafone y Orange se niegan a seguir financiando la fiesta del fútbol. En la anterior subasta -en diciembre de 2015- La Liga adjudicó a Movistar el partido más atractivo de la jornada por 750 millones de euros en tres años, y a Mediapro el resto de los ocho partidos del pago por 1.900 millones.



Mediapro y Movistar pagaron más de la mitad de la factura



En total, 2.650 millones por tres años (2016-2019) solo por dos lotes, lo que significa que entre Mediapro y Movistar pagaron más de la mitad de la factura y, en el caso de la operadora de Jaume Roures, recuperó el dinero alquilando su canal Bein Sports Liga a los propias telecos que se enfrascaron en una guerra por tener los mejores derechos deportivos con el objetivo de arrebatar clientes a su competencia.



Dos años después los operadores han calificado de “ruinoso” el negocio del fútbol y, aunque no descartan pujar, no lo harán por las cantidades que pide Tebas. El temor de las telecos es que el fútbol se termine transformado en "los nuevos móviles", en referencia a los terminales gratuitos que las operadoras subvencionaron para atraer clientes en el pasado, pero sin ninguna rentabilidad y con un elevado impacto económico.



En una reciente reunión con periodistas, Antonio Coimbra, consejero delegado de Vodafone reconocía su preocupación por la burbuja que se está generando en el fútbol. "Si se ha producido la inflación de costes de la que se ha hablado nos preocupa mucho. Ya hemos dicho que el precio que pagan los clientes debería ser tres veces más alto, y nadie quiere pagar 50-60 euros sólo por el fútbol".



Mediapro, el único que reconoce interés



En esta línea, parece que el único que reconoce su interés por la nueva puja es Mediapro, que ganó antes del verano el concurso por los derechos de las tres próximas Champions League y su objetivo es renovar también la Liga española. El problema es donde emitir estos partidos ya que el operador no tiene ningún canal en propiedad.



Es por ello que esta nueva subasta La Liga cuenta con los operadores tradicionales pero también con las televisiones por internet (OTT). De hecho, durante este año el equipo de Javier Tebas ha negociado con Amazon y Facebook para emitir La Liga de manera regular y como complemento a los operadores de pago.

En el sector tampoco se descarta que la Liga -o posteriormente Mediapro si es que gana nuevamente la subasta- utilice a las OTT como un refugio ante la negativa de Telefónica, Orange y Vodafone de negociar. Sky, recién desembarcado en España, o incluso el propio Netflix, podrían ser opciones para emitir los partidos de Bein Sports.