Este miércoles España se despertaba con una nueva portada de la pareja de moda: "Una noche con estrellas en la puerta de la casa de una amiga, ocurrió algo tierno y delicado que Mario y yo nunca olvidaremos", con este tipo de declaraciones la reina de corazones relata su relación con el premio Nobel a la revista ¡Hola! El mismo día Isabel llegaba de la mano de Mario a la presentación del libro de Miguel Ángel Fernández Ordóñez en la Fundación Rafael del Pino. Fernández Ordóñez ocupó el cargo de Secretario de Estado y fue el Gobernador del Banco de España entre 2006 y 2012, los años de plena crisis.

Isabel Preysler y Vargas Llosa en la Fundación Rafael del Pino EL ESPAÑOL

Miguel Ángel era íntimo amigo de Miguel Boyer, el tercer marido de Preysler. "Estoy muy emocionada y conmovida. Ordoñez es un gran amigo para nosotros", relataba Isabel Preysler en exclusiva a EL ESPAÑOL nada terminar la presentación a la que acudió ataviada con un visón negro -denominado en el argot de los peleteros como 'diamante negro', por considerarse más caro y difícil caro- mientras Mario le agarraba de la mano y comenzaba el carrusel de selfies con los adolescentes que se lo pedían. "A la memoria de Miguel Boyer", la pareja se dejó ver como agradecimiento al economista por dedicarle todo el libro a su amigo, fallecido en septiembre de 2014. A pesar de la emoción y el recuerdo del momento ha querido bromear sobre su regalo de San Valentín al Nobel: "Sorpresa, sorpresa", sonreía Isabel.

Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa Gtres

La sala de la Fundación Rafael del Pino estaba a rebosar. Entres los asistentes, Carlos Solchaga, el también ex ministro de Economía o socialités como la diseñadora Elena Benarroch: "La dedicatoria me ha parecido maravillosa, se querían mucho", explicaba la peletera, sin muchas ganas de hablar convaleciente por fiebre debido a una gripe común. 

El difunto Boyer proclamó a Miguel Ángel como su mano derecha en el mandato del socialista como ministro: "Como no se lo iba a dedicar si desde que me nombró nos hicimos inseparables. Era muy querido", contestaba para EL ESPAÑOL Ordóñez. Y es que según ha declarado el ex Gobernador en la presentación de su libro Economistas, políticos y otros animales las "fuertes discusiones" entre ambos en materias como la energía nuclear eran frecuentes, pero Boyer como buen político quería a su lado a alguien que le hiciera pensar y no a los pelotas que suelen abundar en la profesión más denostada del panorama nacional.

Así se sorprendió cuando nada más ser nombrado ministro, Boyer le llamó a filas. El trabajo diario en despachos contiguos en el Ministerio de Economía les acabó haciendo inseparables. Una amistad que perdura después de fallecido Boyer ya que todavía sigue en el recuerdo de Ordoñez en forma de libro, que se sometió a las incisivas preguntas de John Müller, adjunto al director de EL ESPAÑOL. 

El próximo acto público en el que se dejará ver la pareja será este sábado en los Goya en el que el Nobel entregará el premio al mejor guión. "No sé como iré vestida porque quiero que Mario sea el protagonista", aclaraba Isabel sobre su estilismo para pisar la alfombra roja. 

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