Facilitar la accesibilidad y el transporte para que ninguna mujer, viva donde viva en la provincia de Valladolid, se quede sin poder acceder al programa de cribado de cáncer de mama. Ese es el objetivo del convenio que han renovado la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) de Valladolid, la Diputación y la Junta, y por el que se continuará con los autobuses que de manera programada recorren varios municipios para facilitar el transporte a los tres centros sanitarios donde se realizan las mamografías.

El presidente de la AECC en Valladolid, Francisco Javier Arroyo, ha destacado que todas las acciones impulsadas por la asociación “son para luchar por la salud y eso no tiene precio”. En el caso concreto del cáncer de mama, “la prevención es fundamental, en todos los tipos de cáncer lo es, pero en este tiene un efecto muy directo en cuando a la supervivencia que se consigue”.

En Castilla y León se detectan cada año unos 1.500 casos de cáncer de mama, 300 de ellos en Valladolid. Los avances en la detección precoz y la mejora de los tratamientos “están permitiendo que la supervivencia esté ya en el 90 por ciento”, ha apuntado Arroyo, que ha recalcado que es “clave el apoyo a la investigación para que podamos continuar en esta inercia positiva”.

El convenio se firmó por primera vez en 2016 y se ha renovado para continuar con un programa en el que ya han participado 1.785 mujeres de la provincia, que han acudido en los buses ofrecidos al Hospital Clínico, al Hospital Río Hortega o al Hospital de Medina del Campo, los tres centros de la provincia que cuentan con mamógrafos.

Los centros de salud son los encargados de informar a las mujeres de la zona a través de una carta de qué día habrá disponible un viaje y después las interesadas confirman su asistencia llamando para participar en el programa de manera totalmente gratuita.

La prueba de cribado está destinada a todas las mujeres con edades comprendidas entre los 45 y 69 años. En Castilla y León durante el pasado año se realizaron 117.318 mamografías.

El presidente de la Diputación, Jesús Julio Carnero, ha destacado el trabajo de los voluntarios que acompañan a las mujeres en esos viajes, “porque ir al médico es un trámite que no le resulta agradable a nadie pero hay que hacerlo y por eso esa compañía es tan positiva”.

El consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, ha recordado que además de estos programas, el Sacyl también está realizando “un programa de diagnóstico genético a unos 1.200 pacientes y familiares al año, que sirve para localizar riesgos de una manera anterior y poder actuar así a nivel preventivo”.