Resulta mágica la capacidad que tiene el vino, una de las señas de identidad de nuestro país, Comunidad y provincia, para reunir, ya sea en la mesa y con la familia, ya sea en una cena de amigos o en una comida íntima con tu pareja, a un número determinado de personas para disfrutar de su mejor sabor.

En esta ocasión el vino era el telón de fondo para que la XXVIII Fiesta de la Vendimia hiciera vibrar de diversión al municipio vallisoletano de Rueda, que vive con auténtica devoción una fiesta única a lo largo y ancho de toda la geografía española, y que es un estandarte para la localidad.

La celebración coincide con el final de la cosecha y es un encuentro popular en honor al vino hasta el que asisten personas del municipio, que preparan el evento con esmero para que todo salga a las mil maravillas, forasteros de localidades cercanas y turistas y amantes del vino que llegan hasta Rueda sabedores de que allí van a poder disfrutar de los mejores caldos.

Esta Fiesta fue declarada de Interés Turístico Regional  en 2012, y se celebran la plaza cercana a la Calle Real, escenario en el que se instala una carpa en la que cada bodega tiene su hueco y en la que se pueden degustar vinos blancos y tintos acompañados por diversas actividades que hacen las delicias de mayores y pequeños.

En esta ocasión el encargado de dar el pregón ha sido el periodista y director del Magacín Matinal ‘Más de uno’ de Onda Cero, Juan Ramón Lucas,  que ha animado a todos los rodenses a disfrutar de los caldos y ha asegurado que “el vino es vida” y que tiene “presente y futuro”, añadiendo que “cada vez se hacen mejores vinos”.

Además ha estado presente el bodeguero de honor, Fernando Zaratiegui, y la alcaldesa del pueblo María Dolores Mayo, que también han ensalzado la cultura del vino, en un acto amenizado por el Grupo de Jotas Verdejo de Rueda y por los vecinos de la  villa, a los que se les ha podido ver con una sonrisa de oreja a oreja ante las palabras de Lucas, que han estado a la altura de la situación.

Tras el pregón y la pisada de uva, tan característica, que los más peques miraban ojipláticos, también se ha dado el pistoletazo de salida a la XI Feria del Vino Blanco de Rueda con la música tradicional amenizando el momento y las jornadas de puertas abiertas también en muchas bodegas además de la Feria de Artesanía, que reúne a cientos de fieles.

Posteriormente, a eso de las 15:00 horas, se ha podido disfrutar de una paella popular que tenía una pinta tremenda en un día de ensueño y en un marco incomparable como la Ermita del Cristo que ha sido testigo de risas y confidencias por parte de los asistentes que se lo han pasado en grande.

Rueda ha vuelto a vibrar en esta mañana de domingo en un día en el que se ha vuelto a poner de manifiesto la calidad de sus vinos y en el que todos han vivido una mañana difícil de olvidar y que pasará a la historia del municipio pucelano.