Los ciudadanos castellanos y leoneses están cada vez más concienciados con el cuidado del medioambiente a través de hábitos como la separación de residuos para su posterior reciclaje. Prueba de ello es que, según el estudio 'Hábitos de la Población Española ante el reciclaje', realizado por Instituto Catchment para Ecoembes, el 78,3% de los encuestados de la Comunidad declara disponer de un espacio en su casa para depositar los envases en el cubo amarillo (envases de plástico, latas y briks). Así, los hogares castellanos y leoneses cuentan con una media de tres cubos o bolsas (más concretamente 3,2) en los que separar los residuos y darles una segunda vida a través del reciclaje.
Atendiendo a razones sociológicas, el informe refleja que la separación de residuos es un hábito muy extendido en la Comunidad en todas las franjas de edad. Sin embargo, el ejemplo en materia de reciclaje lo dan los más jóvenes, con edades comprendidas entre los 16 y 24 años (86%). A continuación, se sitúan los de 35 a 54 años (79,9%) y los seniors de más de 55 (76,3%). A la cola, aunque con una mayoría recicladora, se encuentran la franja de ciudadanos de 25 a 34 años, con un 72,1% de recicladores habituales.
“Los resultados de este estudio son un reflejo de cómo el reciclaje es un hábito que lleva ya muchos años asentado en la sociedad castellana y leonesa y con el que los ciudadanos ponen en práctica su compromiso ambiental. Estos datos nos permiten mirar al futuro con ilusión y optimismo, y nos empujan a seguir trabajando para dar pasos en firme hacia la economía circular, apostando por el reciclaje para hacer de nuestro planeta un mundo mejor”, ha señalado Ángel Hervella, director de Gestión Local y Autonómica en Ecoembes.
En cuanto al grupo social más concienciado con el reciclaje en Castilla y León, aquellos con pareja estable son el colectivo más comprometido con la separación de residuos domésticos (82,7%), seguidos muy de cerca por los divorciados (78,8%) y los solteros (78,8%). Por otro lado, teniendo en cuenta la unidad familiar, las formadas por cuatro miembros son las más comprometidas (85,1% frente al 78,3% de media).
Respecto al género, las mujeres se encuentran un punto por encima de los hombres. En concreto, el 78,7% de las mujeres castellanas y leonesas asegura tener en sus hogares más de un espacio en casa para separar y tirar los residuos, y uno de ellos destinado al contenedor amarillo. Una cifra que en el caso de los hombres se sitúa en el 77,8%.
Los resultados del estudio también concluyen que la sociedad cada vez tiene menos dudas a la hora de depositar los residuos en el contenedor adecuado. Así, el 92% de los encuestados castellanos y leoneses dicen tener claro los del contenedor azul. En el caso del amarillo, los ciudadanos de Castilla y León identifican más claramente con este contenedor las botellas de plástico, las tarrinas, los briks y las latas, mientras que hay otros residuos, como los aerosoles y las bandejas de corcho blanco, que también deben depositarse en este contenedor pero que todavía generan dudas.