La Plataforma Representativa de Personas con Discapacidad Física y Orgánica en Castilla y León (Predif) denunció la falta de campamentos de verano inclusivos para menores, ubicados tanto en entornos urbanos como en espacios naturales de varios puntos de la geografía española, sobre todo por la falta de personal de apoyo y de monitores preparados y de actividades adaptadas, según informa Agencia Ical.
Los campamentos son una de las opciones elegidas por las familias para que niños y adolescentes disfruten y experimenten cómo es vivir y disfrutar de unos días de ocio con sus iguales. "Lamentablemente, no todos los menores tienen este derecho reconocido, ya que, por su discapacidad o sus necesidades especiales, no pueden acceder a las instalaciones o participar en las actividades programadas", señalaron.
Según datos de las declaraciones del IRPF de 2019, hay 131.956 menores con discapacidad en España, que tienen derecho a que una persona de apoyo, como es el/la asistente personal, pueda acompañarlos en estos campamentos para ayudarlos en lo que necesiten, pero lo más importante es que las actividades y espacios deben ser adaptados y accesibles.
La presidenta de la asociación 'Ayuda a la Dependencia y Enfermedades Raras de Castilla y León', Yolanda de la Viuda, señaló que "a partir de los 12 años, no hay nada de campamentos u ocio inclusivos para nuestros hijos".
Por sus necesidades, defendió que "tiene que haber campamentos urbanos, sobre todo en julio y agosto por las mañanas". Además, detalló que para que puedan participar, es primordial que las instalaciones y las actividades "sean inclusivas y que haya monitores de apoyo formados en discapacidad y dependencia".
Por ello, desde Predif Castilla y León instaron a las Administraciones públicas a que "velen y garanticen la inclusión en sus campamentos urbanos, labor que no se está haciendo y que reclaman, año tras año, las entidades que trabajan para las personas con discapacidad y sus familias, quienes exigen las mismas condiciones que cualquier otra".
Según reivindicó De la Viuda, esta situación tiene que "dar un giro radical y las Administraciones públicas deben dar respuesta para cumplir este derecho y que las familias no tengan que asociarse a todas las entidades que organizan actividades o campamentos inclusivos para tener opción a que sus hijos disfruten del ocio".