Dos personas maduras han tenido una cita de lo más hermosa este jueves en First Dates. Y, aunque la distancia jugaba en contra, ya que venían desde Gerona y Elche, al final el amor ha triunfado y han querido volver a verse.
El protagonista masculino de este particular cuento de hadas es Artur. Tiene 72 años, y es comercial retirado. “Tengo bastante capacidad de decisión, decido las cosas bastante rápido, a veces, demasiado”, decía en su presentación.
Este gerundense llegó al programa con un ukelele, pues ama tocar instrumentos y también cantar. “Me jubilé bastante joven y pude aprender música, que es lo que soñé toda la vida”, le explicó a Carlos Sobera. En concreto, era responsable comercial de una zona bancaria.
Ahora que tiene tiempo libre, “me dedico a aprender música, canto mucho”, y alguna vez se sube a actuar en cafés, donde le conocen “y si me equivoco no me regañan”. Lleva año y medio sin pareja, y tiene tres hijas. “Estoy en momento de transformación para vivir el amor de una manera un poco diferente”, avanzaba.
Su cita fue Carmen, una modista jubilada de 69 años, que procedía de Elche, Alicante. “Puedo ser un poquito cabezota, pero si me convences doy el brazo a torcer”, bromeaba en su llegada al restaurante más conocido de Cuatro.
Carmen y Artur en 'First Dates'.
Cupido disparó rápido sus flechas. “Es una mujer muy atractiva”, reconocía Artur sobre la primera impresión. Para presentarse a su cita, el catalán le cantó unos versos, que a ella le encantaron. “Es todo un artista, ¿eh?”, aplaudía la soltera.
“Me gusta la música y la poesía y ha sido una impresión buenísima”, expresaba la soltera ilicitana sobre Artur. Sin embargo, lo que no le convenció es la distancia entre ambos.
Poco a poco hablaron de aficiones, como el deporte, y congeniaban en muchos aspectos. “Me encanta la cita, me caes muy bien”, le decía Artur. Para él, la distancia no sería ningún problema, porque le gusta mucho conducir.
Es más, coincidieron hasta en la forma de entender una relación. Y es que Carmen no se ve conviviendo con un hombre, porque cree que “sería muy difícil”, y solo busca “un compañero de vida, con mi independencia, y él con la suya”. Algo con lo que Artur comulgaba.
“He tenido suerte de encontrarte”, le diría a Artur a Carmen, antes de tener que decidir si se volverían a ver. “Hemos pensado lo mismo, que hemos tenido mucha suerte”, confirmó la modista jubilada. Y ambos dijeron que sí, que querrían repetir y seguir conociéndose.
