“Cuando lees el libro, te excitas”. Así se ha referido este lunes María Patiño a las memorias de Isabel Preysler, que siguen dando contenido a la televisión casi una semana después de su lanzamiento. Y es que, para la presentadora de No somos nadie, es “brutal” cómo narra la socialité de origen filipino algunos episodios personales.
Los compañeros estaban hablando, entre otras cuestiones, sobre lo dura que fue la prensa cuando Isabel comenzó su relación con Miguel Boyer, lo que le hizo ver titulares como “le ha tocado la china”. Y, sobre ambos, María Patiño destacó: “Yo lo único que puedo decir es que el nivel de erotismo...”.
La presentadora del formato de TEN hizo una pausa, para hacer una pequeña aclaración: “Estoy hablando de sexo ahora, pero es una apreciación. El nivel de erotismo, de erotismo puro, que transmite Isabel contando su atracción sexual hacia Boyer es algo que las 50 sombras de Grey se quedan así (pequeñas)”.
“¿Pero te pusiste cachonda leyendo?”, le preguntó el director David Valldeperas, con humor. María entonces se vio obligada a explicarse: “Fue tal el nivel, de cuando tú sientes que estás haciendo el amor sin tocarse. La primera vez que se miran, en un piso comiendo lentejas...”. “Uy, qué rico, ¿no? Tiene mucho hierro”, le interrumpían sus compañeros.
“El nivel de erotismo era tal, que simplemente mirándose a los ojos, sin tocarse...”, seguía valorando Patiño, que añadió que la primera noche en la cama de Isabel y Boyer se produjo en París. “Para mí es la mejor época, cuando la vi más guapa”, apostillaba Belén Esteban.
María Patiño en 'No somos nadie'.
David Valldeperas volvía a interrumpir a María para preguntarle si ella podría escribir episodios similares a los que cuenta Preysler. “Pero cómo no voy a vivir el sexo”, fue la respuesta de la gallega, que continuó hablando de las memorias.
Así, calificó como “brutal, brutal” el hecho de cómo Isabel “transmite la atracción física sexual que siente, teniendo a su lado al marqués de Griñón, enfrente a Boyer y a Elena Arnedo, los cuatro. Cuando lees el libro, te excitas”, terminaría por insistir.
El director volvió a preguntar a María Patiño por sus experiencias personales, y ella le devolvió la pregunta. “Yo sí”, le respondió Valldeperas. “Pues yo también”, añadió María, no sin lamentar el haberse preparado muy bien el tema de las memorias de Isabel para acabar hablando de otros asuntos.
