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Aunque la séptima temporada de Lo de Évole todavía no ha comenzado, a excepción del especial con Ricky Rubio el pasado 6 de julio, eso no significa que el periodista catalán esté inactivo. De hecho, el comunicador ha vuelto con su columna, en la que ha reflexionado sobre la situación política española.

Évole llamaba ya la atención con el titular de su columna, el cual señalaba que la frase “Pedro Sánchez, hijo de puta” era la “canción del verano”. El propio barcelonés señalaba en el primer párrafo de su texto el motivo por el que había utilizado un titular tan directo.

“Perdonen por el título. Pero es que oí a Juan Magán, cantante de gran éxito, en su concierto en Marbella del 5 de agosto, proclamar que esa era la canción del verano, mientras su público coreaba el hit”, argumentaba en su columna en el diario La Vanguardia.

El insulto al presidente del Gobierno ha señalado que ha sonado “en fiestas populares, en estadios de fútbol. Incomprensiblemente nadie la ha grabado para Spotify”, para después lanzar un comentario irónico a Isabel Díaz Ayuso, a quien le atribuía el origen del improperio.

El comunicador también resaltaba cómo los gritos sobre Franco también se están escuchando. “¿Qué influencer le puede contar la historia a la chavalada, que se suma al cántico sin saber lo que canta?”, se preguntaba.

Jordi Évole en una imagen de archivo. Atresmedia

“No creo que detrás de todos los que corean ‘Pedro Sánchez, hijo de puta’ o ‘Franco, Franco’ haya una excesiva politización. Me recuerda al ‘Que te vote Chapote’, coreado por quien no tenía ni idea de que Chapote era el asesino de Miguel Ángel Blanco”, escribía.

“Tampoco creo que sean exclusivamente proclamas políticas. También son memes, formas modernas de jolgorio, pero que van calando”, advertía, para después señalar que, según su punto de vista, consideraba que había “una parte de la población cada vez más desinhibida, descarada, con un fin común: odiar a un presidente”.

Évole salía así en defensa del primer ministro. “[Buscan] deshumanizarlo, echarlo. Ya, como sea. Lo desean desde grandes empresarios hasta periodistas influyentes”, opina, señalando después que no son los únicos.

Jordi Évole en una imagen de archivo. Atresmedia

También entre clases populares en que se dan las condiciones para que el mensaje cale. Porque en sus barrios roban delincuentes reincidentes y ellos no se pueden pagar las alarmas que anuncian machaconamente todas las teles. Porque sus pueblos se queman y las administraciones se tiran la mierda unas a otras”, proseguía.

Évole, entonces, criticaba la situación de los partidos conservadores. “Y la supuesta derecha moderada acaba diciendo casi lo mismo. Cuando imitas el discurso ultra, el consumidor quiere el original, no el sucedáneo”, expresaba, para después hablar de los partidos progresistas, con especial pulla al PSOE.

Y miras a la izquierda y ves a Ábalos, a Cerdán, a Koldo. Y los alquileres que no dejan de subir. Y a un presidente que ha aparecido en televisión por primera vez en un año. Y a una izquierda a su izquierda sin rumbo, que puede perder la mitad de los votos por no unirse”, lamentaba.

Évole concluía su columna señalando que consideraba que la famosa frase ‘Pedro Sánchez, hijo de puta’ “provoca más rechazo que adhesión” y finalizaba con un mensaje conciliador. “Los que lo gritan hacen mucho ruido. Pero hay mucha más gente callada que tiene clarísimo que podemos ir hacia un retroceso histórico”, reflexionaba.