Andreu Buenafuente arrancó Futuro Imperfecto caracterizado, una vez más, del humorista Eugenio. “Buenas noches. Dada la buena acogida de crítica y público, el equipo me ha pedido que vuelva para que ustedes se desternillen. Osea, que lo haces bien, y te toca trabajar más. Cómo quieres que un país vaya bien así”, decía al inicio, antes de encadenar varios chistes.
Más tarde, el presentador dejó el personaje de Eugenio a un lado para dirigirse directamente al público: “Ahora vamos con la actualidad de estos días. Ha pasado una semana y todavía estamos hablando de la fiesta de temática gánster, despilfarro de dinero, comportamientos censurables”.
Parecía que, de nuevo, hablaría de Yamal, pero dio un giro. “Me estoy refiriendo a la fiesta que se pegó Montoro en el Ministerio de Hacienda”, sentenció, logrando grandes aplausos del público. “Vamos a hablar de Montoro”, insistió.
El catalán repasó varios titulares sobre la imputación del exministro de Hacienda y a otros ocho altos cargos de ese departamento en la época del Gobierno de Rajoy. “Un ministro del PP investigado por corrupción, me quedé muerto”, sentenciaba.
Andreu puso varias voces como si fuesen personas diferentes: “No me lo esperaba”. “Me cogió por sorpresa”. “Qué me estás diciendo”. “Y Pedro Sánchez tampoco se lo esperaba. Es increíble la suerte que tiene este hombre, el palacio de la potra hay que poner ahí”, narraba al público.
Buenafuente en 'Futuro imperfecto'.
“Esto ya se va a estudiar en el futuro. Cuando está en el momento más bajo, a punto de caer, pasa algo y se salva. En principio. Pedro Sánchez es el Real Madrid de la política”, añadía, logrando aplausos de nuevo del público.
“En el PP han visto lo de Cerdán y les ha picado el orgullo. No en público, sino en privado. Han dicho: éramos los mejores en esto”, seguía relatando Buenafuente, en referencia a casos de corrupción. En el monólogo describía cómo los populares estarían buscando “el ministro que nos quedaba sin imputar”.
“En la foto de la boda de la hija de Aznar, mira ahí”, decía. “En esa foto solo faltaba por imputar al cura. Me dicen por el dedo que tengo en la oreja que el cura también”, añadía. “El alzamiento del ramo era para ver quién sería el siguiente imputado y todos diciendo: y,o yo, yo”, le contaba al público.
Entonces Buenafuente resumió lo sucedido. “Se ve que Montoro presuntamente cobraba dinero a través de su despacho, que había dejado legalmente, pero tenía a sus amigos y familiares. A cambio de modificar algunas empresas. Habla con el despacho, para que te cambie la ley y así pagas menos impuestos. O como yo digo: un menú defraudación”. “Hacienda somos todos los que nos somos amigos de Montoro”, terminó por decir al respecto.