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Carlos García-Hirschfeld ha regresado este jueves a la que fue su casa televisiva, Antena 3, donde durante años brilló al frente de Impacto TV y otros formatos más efímeros como La Piraña. Y lo hacía en el programa Y ahora, Sonsoles, que dedicó el tramo final de su emisión a charlar con el comunicador, en un particular homenaje a Jesús Hermida.

Hermida falleció en mayo de 2015, y desde el magacín vespertino han querido rendirle un homenaje con Carlos, que arrancó su carrera a su lado. Tras ver un vídeo de la trayectoria de Hermida, que estuvo 12 años en Antena 3, Sonsoles Ónega le preguntó por su antiguo jefe. “Porque todos decís, también las chicas Hermida, que era que era duro, que era exigente, que era un poco raro”, introducía.

Era muy raro, raro como un perro verde, pero era superafectuoso. Era muy duro, en el sentido de que tú hacías un reportaje, le presentas tú una idea, o te daba él una idea, que era también muy generoso dando ideas, y el reportaje no le gusta. Y te lo decía: ¡esto es una puta mierda!”, respondía Carlos.

Yo nunca lloré. Pero claro, había veces que el que alguien te diga eso, tu jefe, puede hacerte llorar”, reconocía Carlos, “Le ponía supernervioso a la gente que lloraba, y había que reaccionar, hacer el cambio”, seguía narrando el invitado.

Así, Carlos García-Hirschfeld siguió detallando como el conductor de espacios como Con Hermida y compañía era “muy duro, pero lo que te exigía siempre era que no te quedases con lo la primera idea, que le dieseis vueltas”

Imagen de 'Y ahora, Sonsoles'.

“Y a mí eso me ha ayudado mucho. Haciendo programas te quedas con la primera escaleta que te sale o con el primer pensamiento y dices: no, vamos a darle una vuelta más”, siguió narrando

Así, dibujó a un Hermida rígido, pero que sabía lo que se hacía. “Lo mismo exigía a todos y yo creo que eso hizo que todos los que trabajamos con él hicimos, yo creo, muchas buenas cosas, ¿no? También algún truño, pero en general Jesús no permitía que te fueras de cualquier manera”.

Además, quiso destacar la faceta más afectuosa y generosa de Hermida como jefe: “He tenido pocos jefes tan afectuosos, tan dadivosos, nos regalaba siempre cosas, relojes. Le regalaban cosas y las daba al equipo, o sea, un tío muy generoso, y luego muy generoso también con hacerte volar”.