Melani García se metió en la piel de Anne Hathaway en la película Los Miserables el pasado viernes, cantando en directo en la final de Tu cara me suena un desgarrador I dreamed a dream. Un número que le valió el apoyo del público, que desde casa, con sus votos, la hicieron ganadora.
La joven artista valenciana, que se dio a conocer en La Voz Kids, y que luego brilló en Eurovisión Junior, ha demostrado una gran disciplina en el escenario, y fuera de él. Comenzó el programa con 17 años, cumplió la mayoría de edad en el plató, y mientras preparaba el número que correspondiese se sacó el bachillerato y aprobó la selectividad.
BLUPER ha podido hablar con la ganadora, que, en un acto de generosidad, dividió los 30.000 euros de premio entre los demás participantes para que todos pudiesen donar a la fundación que deseasen. Y Melani nos ha desvelado cómo ha vivido la experiencia, cómo ha sido la relación con sus compañeros, y cómo se imagina que será su carrera dentro de diez años.
Apostaste en la final por un número que no solamente era cantado, en el que te tenías que romper y en el que tenías que jugar con la voz de una manera que no lo habías hecho. ¿Cómo fue esa elección tan complicada, cuando, a lo mejor, lo fácil hubiera sido, entre comillas, una exhibición de de potencial?
Pues estuve pensando en hacer de Maria Callas, por ejemplo. Alguna ópera. Pero le tengo tantísimo respeto a Maria Callas que nunca me atrevería a imitarla, y decir, “oye, soy Maria Callas”. Entonces yo dije: es que no puedo, no puedo.
Y como había hecho también ya ópera con J.J., pensé en hacer algo como que no hubiese hecho: pues un musical. Y ¿cuál es mi favorito? Los Miserables. Y además es una canción que para mí significa mucho, porque la hice hace 10 años, en el primer concurso que me presenté, en un karaoke de Valencia. Y me parecía muy bonito hacerla como 10 años después ahí, en Tu cara suena.
Melani en la gran final de 'Tu cara me suena'.
¿Cuánto tiempo llevabas poniendo sobre la mesa esa opción para la final?
Cuando me eligieron la primera finalista con J.J. ya me dijeron: vete pensando ya algo. Y como Tate McRae era de exhibición, tuve ahí una o dos semanitas para pensar.
En la final, la cara de Esperansa Grasia pasando cortes, pues parecía que pensaba quedar última, se robó muchas miradas. ¿Llegaste a pensar que ganaba ella, con esos 2 millones de seguidores detrás?
Claro, si yo la miraba y todo en plan, “venga, va, ¿qué vas a hacer?”. Porque claro, tiene dos millones en TikTok y yo digo: “Bueno, pues ya está. Yo he venido aquí a disfrutar”. Y si quedaba la segunda, pues supercontenta ya. Y de repente dicen: ¡Melani! Y me llevé la sorpresa de mi vida.
Yo tampoco tengo una carrera tan grande como la de mis compañeros, tipo Gisela o Ana Guerra, que a mí me parecen artistazas. Omikel, que es un pedazo de artista. Empezando tampoco estaba, pero no tenía tantos seguidores como ellos. Pero de repente dicen mi nombre y vamos, es que no me lo creo, ni hasta ahora.
Se transmitía que contigo por ser la benjamina había como un cuidado especial. Y fue superbonito cómo Goyo te agarró de la mano en esa actuación final en la repetición y no te soltó.
Fue superbonito, lo hablábamos con los compañeros. Porque la repetición de la canción final también fue como un cierre, estábamos todos como emocionados, también era un poco una despedida para nosotros y fue superbonito.
Nos tenemos muchísimo cariño, y a veces no nos da tiempo a que se muestre mucho, porque es un programa que va muy rápido y a veces no se puede mostrar por pantalla lo que hay detrás de cámaras.
Y que ese momento haya sido así como tan especial y que se haya visto un poquito todo lo que nos queremos, nos pareció un cierre muy bonito.
Tiene que haber sido una temporada dura para ti, compaginando los estudios, y ese pedazo de trabajo que tiene que ser concursar en un programa así, con tanto trabajo y exigencia.
Sí, la verdad es que ha sido un año muy duro. Ha sido muchísimo esfuerzo, muchas horas, con días que me preguntaba dónde me había metido. Pero me hacía tanta ilusión, porque es una oportunidad única en la vida.
Y bueno, logré compaginarlo con la selectividad y con las pruebas de acceso al conservatorio superior y al final he entrado en las dos carreras.
Y has ganado Tu cara me suena.
Ha sido un año que dices: mira, pues al final todo el esfuerzo ha valido la pena. Porque me lo he pasado superbién, he disfrutado un montón y he cumplido mis sueños.
Al ser un año tan complicado tuyo a nivel formativo, ¿llegaste a pensar que quizá Tu cara me suena te iría mejor en la próxima temporada?
Sí. Tu cara me suena en realidad son tres días de grabación, y cuatro si tienes coreografía. Iba a ir al instituto un día, y pensé: es que voy a suspender todo si voy un día. Y al principio, con muchísima pena, dijimos que no, que por tema de grabaciones y fechas y el año que me había tocado, en segundo de bachillerato, no se podía.
Y entonces me llamaron y me dijeron: no, es que, por favor, te queremos en el programa. Venga, vamos a arreglarte, aunque sea que vayas un día y medio, y que luego te ponemos ahí profesor y todo para que puedas repasar cuando tengas examen.
La verdad es que me hicieron la vida ahí superfácil. Me ponían un coche, me ponían un profesor. Fue superbonito, para que no deje los estudios, porque hay muchos programas que igual no se preocupan así.
Y Tu cara me suena se ha preocupado desde el momento uno en que yo no dejara los estudios porque sabían que era algo muy importante para mí. Estaré siempre agradecida con todo el esfuerzo que han hecho ellos también.
Imagen de los finalistas de 'TCMS'.
¿Qué has descubierto de ti misma esta temporada?
Un montón de cosas. Yo venía del canto lírico y solo había cantado lírico, y nunca había probado a hacer rock o pop. Y, de repente, romper la voz como The Rasmus. He descubierto muchísimas voces que no sabía que tenía ahí dentro. Y bailar y cantar a la vez, que tampoco lo había probado.
Cada semana te empujan a hacerlo, te pones un reto a ti misma y dices: venga, va, voy a sacarlo. Y al final, poquito a poquito, vas descubriendo cosas que ni tú misma sabía que tenías ahí dentro.
¿Está el Benidorm Fest en tu horizonte, está volver a Eurovisión, ya como adulta, en tu futuro?
Pues me gustaría mucho, la verdad, porque es muy bonito. A mí me encanta Eurovisión, soy friki fan de Eurovisión. Me encanta. Cuando vino Melody casi me muero ahí en el camerino.
Pero yo lo que siempre he dicho es que, como le tengo tanto respeto al Festival, y me parece algo importante, no como ir por vender una canción y ya está, sino que quiero ir bien.
Quiero esperarme a encontrar una canción que yo diga: va, esta es la canción, esta me gusta, me siento cómoda y este es el año. Y ya cuando tenga la canción ya me presentaré ahí, la primera en la cola.
¿Cómo te ves de aquí a 10 años?
Madre mía, tendría 28. Yo creo que seguiría haciendo lo que me gusta, lo que me hace feliz, que al final es cantar, bailar y ya habría terminado los estudios, la carrera. Me encantaría estar en conciertos, estar en alguna ópera.
¿Te ves con una carrera musical, digamos, tradicional, de sacar discos y hacer conciertos, o te imaginas más en espectáculos teatrales o de ópera?
Yo estoy abierta a todas las opciones que me digan, la verdad, porque a mí todo lo que sea música me encanta y me llena. Pero me encantaría algún día tener algún un concierto propio. Como cuando yo voy a ir a ver a los artistas, estar algún día están en ese escenario, vamos, yo me moriría.
Y compaginarlo con el Conservatorio Superior y las óperas. Me encantaría algún día poder estar haciendo una ópera, algún papel, aunque esté atrás del todo.