Equipo de investigación, el programa que conduce Glòria Serra en laSexta, estrenó este pasado viernes 12 de abril una nueva entrega del formato titulado El legado oculto de Franco. En este episodio, el equipo de reporteros descubre que varios objetos que pertenecieron al dictador Francisco Franco están siendo vendidos en casas de subasta de todo el mundo. Un hecho al que el programa habría puesto a un posible ‘culpable’: su propia familia
El espacio de laSexta señala que está siendo la familia Francia la que está vendiendo estos artilugios, varios de los cuales fueron presentes de un valor elevado que éste dio en vida a allegados y personas de confianza. Entre los objetos que señalaba el formato están un trofeo que le dio a la Casa Regional de Valencia y que habría sido vendido por 687 euros; una placa de plata de Lloret de Mar, que habría sido vendida por 435 euros, y un trofeo procedente de Reus, por un valor de 140 euros.
El programa señala directamente al nieto de Franco, Jaime Martínez-Bordiú, quien figuraría como presunto vendedor. De hecho, Equipo de investigación habló directamente con el hermano de Carmen Martínez-Bordiú, quien negó haber vendido objetos de su abuelo en portales de venta de segunda mano. “Eso es falso”, expresó, a pesar de que su nombre aparecía en las transacciones. “Pues que aparezca el nombre que quiera”, dijo al formato de laSexta.
“Hace casi 50 años que murió mi abuelo, ha habido muchos robos y extravíos, yo qué sé”, argumentaba como posible explicación a que alguien utilizase su nombre. De la misma forma, el hermano de Francis Franco continuaba negando que fuese él quien vendiese los artilugios del dictador.
El espacio de investigación ahondó también en que otros artículos personales del dictactor llegaron a venderse por cifras muy superiores, por miles de euros, entre las que estaría un importante número de joyas que habría portado Carmen Polo. Eso sí, sobre estos objetos, Equipo de investigación no puso el ojo en Jaime Martínez-Bordiú. Por otro lado, también se habló de la falsa marquesa que, en 1941, expolió varios bienes procedentes del Museo del Prado.
La estafadora, quien decía ser la marquesa de Arnuossa, llegó a acumular 400 piezas, entre las que estaría un tríptico de Van Orley, el cual continúa siendo reclamado por la familia de un antiguo diplomático español que perdió su cargo durante la Segunda Guerra Mundial.
“La marquesa de Arnuossa era una señora particular, llamada Teresa Álvarez Herreros de Tejada, que no tenía título nobiliario alguno. Es un personaje realmente misterioso, porque, por ejemplo, no conocemos ninguna fotografía suya”, expresaba Arturo Colorado, catedrático emérito de Arte e investigador, al programa.