Ana Duato es Mercedes Alcántara y Mercedes Alcántara es Ana Duato. Después de papeles tan memorables como el de Virginia en Brigada Central, Irene Cerezo en Médico de Familia o Lola en Querido Maestro, la actriz valenciana empezaba a dar vida a la matriarca de una familia española de los años 60 un 13 de septiembre de 2001 en una nueva serie para TVE llamada Cuéntame cómo pasó.

Sin ser consciente de ello, Duato iniciaba una nueva etapa en su vida profesional (y personal) que le llevaría a una dedicación plena, pero también a interpretar al personaje más popular y premiado de su carrera con siete premios TP de Oro, tres Fotogramas de Plata, dos premios Iris  y semifinalista europea en los Premios Emmy Internacional. 

Un personaje que ha evolucionado como ninguno en la historia de la ficción española, retratando como nunca antes el progreso de las mujeres en la sociedad española. "Mercedes ha sido un personaje que, cuando se estrenó la serie ambientada en el 68, era una mujer que viene a apoyar a su marido del pueblo, con una educación poco justa y, con toda esa fuerza de superación, termina estudiando una carrera (Económicas), teniendo un negocio propio y conciliando con lo que hay todavía", afirma la actriz. 

['Cuéntame cómo pasó’: Herminia toma una drástica decisión que afectará a toda la familia]

En 22 años ha dado tiempo a que la televisión evolucione tanto que ahora hasta se os puede ver en plataformas... 
En este mundo de las pantallas, creo que lo que vamos a conseguir con esta temporada es unir a los que se fueron, a los que empezaron con nosotros, a los que han nacido y se han hecho mayores, a los que han cumplido la mayoría de edad... Creo que es el momento para unir a todos y que la familia vuelva a ver Cuéntame en una sola pantalla como se ha visto siempre. 
Se despide Cuéntame, pero también se despide nuestra familia Alcántara... 
La serie va a dejar un hueco importante. Hemos conseguido una empatía con las historias que al final todos los personajes son capaces de contar cualquier historia y de poner encima de la mesa temas muy importantes del ser humano: la vida, la muerte, el amor, la venganza... Y eso es único. Dejamos ahí un hueco como referencia de muchas cosas: de política social. Hemos cambiado, pero también somos lo que somos.

Mercedes tiene la Singer como gran aliada de muchas mujeres de aquella época. Con una máquina de coser, se creó una revolución, traían su propio sueldo a casa

En el caso de Mercedes habéis retratado muy bien la evolución de la mujer...

El capítulo de Mercedes se titulaba La fuerza. Es esa fuerza que tienen las mujeres de esa inteligencia, esa capacidad de superación, esa entrega, esa generosidad... Y Mercedes ha sido un personaje que, cuando se estrenó la serie ambientada en el 68, era una mujer que viene a apoyar a su marido del pueblo, con una educación poco justa y, con toda esa fuerza de superación, termina estudiando una carrera (Económicas), teniendo un negocio propio y conciliando con lo que hay todavía. Las mujeres seguimos conciliando, que es el éxito profesional y personal. 

Mercedes tiene la Singer como gran aliada de muchas mujeres de aquella época. Fue un cambio importante porque, de pronto, con una máquina de coser, la mujer crea una revolución, trae su propio sueldo a casa. También tiene a su madre como gran aliada. También otra mujer. La figura de la abuela es una figura fundamental. Y luego está la educación. A muchas mujeres les hubiera gustado estudiar una carrera. Tenían la capacidad para hacerlo, les sobraba inteligencia y ganas, pero no pudieron. Realmente es un personaje que ha evolucionado muchísimo todos estos años. Y también a través de sus hijos: de Inés, su hija, que es una revolucionaria que le abre el mundo, que mira través de ella, de sus ojos, los cambios sociales y de costumbres... 

Ana Duato y María Galiana.

¿Cómo ha sido grabar esta temporada en la que no solo os despedís del público, sino de vosotros mismos?
Es que hemos crecido mucho profesional y personalmente a lo largo de todos estos años. Todo el equipo es una gran familia. El equipo que hay detrás ha estado ahí amándonos desde un papel en blanco con los guiones y toda la producción, todo lo que se crea alrededor.  Somos una gran familia que ha construido un proyecto del que nos sentimos muy orgullosos. Y estos siete capítulos es como cerrar una etapa sintiendo mucho orgullo por el camino recorrido y dejando un trabajo muy importante más allá de una serie de televisión. Dejamos parte nuestro, de todos nosotros, porque es nuestra historia.

El público se merecía un final a la altura de todos esos fieles años que han estado ahí llorando, riendo, viviendo, creciendo con nosotros... No se merecían un final rápido

¿Recuerdas el último día de grabación?
El día del último día de grabación fue un día muy emocionante. Llevábamos llorando por las esquinas semanas. Intentábamos mantener el tipo, pero hemos crecido juntos y era difícil. En la gran familia de Cuéntame, como en la vida misma, hemos tenido nacimientos, casamientos, muertes, divorcios... Hemos dado todo lo que teníamos, lo hemos puesto ahí en ese plato de Cuéntame desde el primer momento. Cada temporada que hemos hecho hemos intentado superarnos y hacer la serie que queríamos. Y eso llega y traspasa. No ha habido una sensación de vacío, sino que me sentía muy llena, satisfecha y orgullosa de todo el trabajo, de tener la sensación de haber hecho un buen trabajo. 
Además, habéis podido cerrar la serie como se merece... 
Hubiese sido una pena. El público se merecía un final a la altura de todos esos fieles años que han estado ahí llorando, riendo, viviendo, creciendo con nosotros... No se merecían un final rápido.

Ana Duato e Imanol Arias.

¿Crees que el final estará a la altura?
Yo creo que este final no va a defraudar para nada. Hablamos de cosas muy importantes, de temas que se ponen encima de la mesa, de la vida y la muerte, de las herencias, pero no solo materiales, sino afectivas.

Los personajes crecen constantemente y tú con ellos, con lo cual es muy difícil cansarse de ellos porque están en constante evolución, que están vivos

Después de 22 años en este proyecto, ¿te volverías a embarcar en uno igual?
Yo jamás pensé que íbamos a hacer veintidós años. Se me han pasado volando de alguna manera. Me preguntan mucho si no me he cansado de hacer el mismo personaje. Y yo siempre contesto una cosa: ¿tú te cansas de tu vida? A ver, hay épocas buenas, épocas malas... Este año se me ha pasado muy rápido. Pero los personajes crecen constantemente y tú con ellos, con lo cual es muy difícil cansarse de unos personajes que están en constante evolución, que están vivos.
En tu caso, además, no has querido hacer ningún otro papel en estos años. ¿A qué se ha debido?
En 22 años tienes otras etapas por ejemplo, como madre, que también requieren tiempo. O también épocas donde Cuéntame ha abarcado más de siete meses. Y luego está que necesitas también tiempo para tomar un poco de distancia.